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/ Darío Pale /
28.09.2024. Xalapa, Ver.- El presidente de la Asociación Nacional de Padres de Familia, Alejandro Águila Arguelles, informó que se presentó una denuncia ante la Secretaría de la Función Pública por lavado de dinero en contra de la Secretaría de Educación Pública, pues acusó que las cuotas voluntarias de los padres de familia están siendo desviadas.
En entrevista explicó que, “están siendo utilizadas para justificar ante los órganos de control el gasto del mantenimiento de las escuelas. Por eso es el choque permanente, ellos controlan el dinero y en muchos de los casos no se puede ni denunciar porque quien tendría que denunciar los desvíos sería el propio gobierno de los estados”.
Indicó que además solicitarán que se auditen a las cuentas del Gobierno de los estados, ya que “mañosamente” la Secretaría de Educación instruye a que las asociaciones de padres depositen ante las cuentas bancarias de los estados cuando el dinero no es público y la educación es gratuita.
Estimó que los ingresos de estas aportaciones voluntarias que hacen los padres y madres de familia oscilan en los 27 mil millones de pesos a nivel nacional en cada ciclo escolar.
Asimismo, señaló que son las mismas secretarías de Educación quienes ponen las mesas directivas a modo y que se coluden con los directores para el desvío de ese dinero y por ello aseguró que se está sugiriendo a nivel nacional que ya se suscriban al SAT como persona moral sin fines de lucro y que se presenten los informes de los ingresos y egresos a este organismo y no a la Secretaría de Educación.
También precisó que de estas aportaciones voluntarias se pagan todas las necesidades de los planteles cuando estos son públicos y les corresponde a los gobiernos de los estados, sin embargo el dinero no se aplica y se desvía, “deberíamos negarnos a hacer esos pagos”.
Por último agregó que por ello se trabaja con el Gobierno federal hacer una propuesta para la Reforma a este reglamento y que la dependencia saque las manos en asuntos de padres de familia, “porque ellos no son competentes y nos echan la culpa, pero si retiramos ese recurso las escuelas se caen”.