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05/11/021/ México .- El Presidente de México Andrés Manuel López Obrador (AMLO) volvió a atacar a la clase media porque a su juicio llegan a los centros de vacunación contra COVID-19 con actitud molesta que “ni siquiera dan las gracias”, la gente humilde agradece y da bendiciones a quienes le aplican la dosis.
Al insistir en promocionar la revocacion de mandato, aun contra la norma, el Presidente criticó las supuestas actitudes de algunas personas que aseveró – sin pruebas-, pertenecían a la clase media.
“¿Ustedes creen que se puede llevar a cabo un cambio, una transformación con la prensa, con los empresarios, con los políticos corruptos?
No, el cambio se puede llevar a cabo y se está llevando a cabo, la transformación, con el pueblo, ellos son los mexicanos, millones de mexicanos, los que están impulsando la transformación del país; si no, ya el Reforma y El Universal, y las televisoras y las estaciones de radio, los columnistas, los intelectuales orgánicos, ya nos hubiesen sometido, nos tendrán bocabajeados; pero no, es la gente. Por eso atender a todos, escuchar a todos, respetar a todos, pero darle preferencia a la gente humilde y, por el bien de todos, primero los pobres”.
“Que además hay algo adicional: la gente humilde es muy agradecida, es muy buena, no se siente sabionda, actúa con humildad. El otro decía yo que se vacuna a una gente de clase media, no generalizo, pero llega al centro de vacunación molesta. Ya la atienden”.
En su narrativa “didáctica” el presidente describió una escena:
“-¿Cuánto tiempo va a durar?
-Ah. Pues apúrese ¿no? ¿Por qué se tardaron tanto?, porque tienen la obligación de vacunarnos, es nuestro dinero, son nuestros impuestos.
Y ahí van y ya la vacunan. Ni siquiera da las gracias.
Una gente humilde, aun sabiendo que es dinero del presupuesto y que es una responsabilidad del gobierno o de los servidores públicos vacunarlo, va en silencio, con humildad, lo vacunan, ‘muchas gracias, muchísimas gracias, y gracias, y gracias, y gracias’, y bendiciones.
Ojalá y entre más arriba estemos en la escala social, en la escala económica, no olvidemos la humildad. Es más, pensar que el poder es humildad.”, concluyó.