Las mujeres, las más afectadas por la explotación sexual

ONU. 3 febrero 2021.- En América la gran mayoría de las víctimas de trata también son las mujeres que comprenden un 69% de todas las víctimas en 2018, sin embargo, también se ha detectado un aumento del 13% entre los hombres desde el 2018.

El número de niños y niñas entre las víctimas de trata se ha triplicado en los últimos 15 años, y el porcentaje de niños se ha multiplicado por cinco, asegura un nuevo informe publicado este martes por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC).

Según el Informe Global sobre la Trata de Personas, las niñas son tratadas principalmente con fines de explotación sexual, mientras que los niños son utilizados para trabajos forzados.

En 2018, 148 países detectaron y denunciaron alrededor de 50.000 víctimas de trata de personas. Sin embargo, dada la naturaleza oculta de este delito, el número real de víctimas es mucho mayor.

El Informe muestra que los traficantes de aprovechan de los más vulnerables, como los migrantes y las personas sin trabajo, y es probable que la recesión inducida por el COVID-19 haya puesto a más personas en riesgo.

Asimismo, el informe detalla una tendencia creciente de víctimas de explotación sexual, del 58% en 2016 and 64% en 2018. La inmensa mayoría, el 96%, son mujeres y niñas.

La segunda forma más comúnmente denunciada es la trata con fines de trabajo forzoso, aunque la proporción se mantuvo en un nivel similar al de 2018. Argentina y Chile informaron de más víctimas que habían sido víctimas de trata para este propósito que para la explotación sexual.

Los datos recopilados en la región muestran que, en comparación con otras subregiones, la proporción de mujeres víctimas que fueron víctimas de trata para realizar trabajos forzados en 2018 fue grande. Casi la mitad de las víctimas de esta forma de explotación fueron mujeres, divididas casi por igual entre mujeres y niñas.

El informe asegura que la gran mayoría de víctimas detectadas en Sudamérica son víctimas de trata doméstica. Estos países son también destinos para los flujos de tráfico transfronterizo dentro Sudamérica. Sin embargo, dentro de la subregión, no hay un patrón claro de países de origen y destino. Por ejemplo, víctimas de Paraguay y Bolivia se han detectado en Argentina, mientras víctimas de Venezuela se han detectado en Colombia y Perú. Brasil y Chile también son destinos de víctimas de Bolivia y Perú, entre otros estados de origen, y Perú también es destino de víctimas de trata de países vecinos.

En consecuencia, aseguran los expertos, los flujos de tráfico dentro de América del Sur parecen bastante complejos, pero también son limitados en términos de alcance geográfico, ya que la mayoría se limitan a un país.