Semana Santa en España se queda sin feligreses y procesiones.

/María Esther Beltrán Martínez/

Andalucía, España. 02 marzo 2021.- La Semana Santa de este 2021 nada tiene que ver con las que se realizaban antes de la pandemia del Covid 19. Es una fecha donde las ciudades de España veían procesionar a sus titulares de su cofradía. El tráfico se detenía en el centro de la ciudad, las calles se ocupaban por visitantes y locales; personas sin guardar distancia, hablando entre ellos, muchas veces empujándose para ver de cerca las imágenes o vigilar a los familiares y amigos que participaban como nazarenos, costaleros, hombres de trono, capataces y mujeres elegantes con mantilla.

La Semana Santa es una fecha importante en España no sólo para los que participan sino para todos los que se involucran laboralmente. Son millones los que viven de esta fecha tan significativa.

Sólo por empezar hay miles que trabajan en los preparativos: bordadores, artistas gráficos, diseñadores, vendedores de telas e hilos, modistas, músicos, cereros, talladores, restauradores, imprentas y vendedores de artículos religiosos, entre otros.

La Semana Santa en Andalucía, deja sin duda gratas experiencias. En sus ciudades se vive intensamente la Pasión de Cristo. Las procesiones se componen de tronos tallados en metales y maderas, imágenes de Vírgenes y Cristos que dan fe a miles de creyentes que los conocen en sus diversas evocaciones, siendo algunas las que marcan la fe de toda una ciudad.

Cada región defiende sus procesiones y ponen en tela de juicio cuál es la más bella y pasional. Lo seguro es que todas tienen un elemento de singularidad que deja emocionado sea o no creyente. Este 2021 es distinto, no hay guías para ver procesiones, pero si existen las que muestran dónde quedan las casas de hermandad. Donde se encuentran los titulares en sus tronos en espera de sus feligreses. Las vírgenes lucen sus mantos bordados, cada uno es una obra de arte, así como sus vestidos, sus coronas y accesorios que portan. Algunas lucen sus joyas que son sólo para esta fecha tan significativa. La saetas no podían faltar. No están en ningún balcón, ahora se canta a los pies del trono.

Se hacen colas para pasar a verlos. Las medidas de seguridad se marcan en carteles. Obligatorio el uso de cubreboca, se toma la temperatura antes de entrar se ponen gel y el número para entrar es reducido y por tiempo limitado.

El tiempo de espera va de dos horas o más, no importan es tiempo dedicado a visitar y disfrutar con la familia y amigos. Personal de la cofradía tiene la labor de recordar la sana distancia y cumplirla. Se llevan semanas pidiendo responsabilidad debido al incremento de la incidencia del Covid en España.

Sin embargo estos días es para pedir por los vivos y muertos. Para tener fe que el próximo año sí habrá procesiones y que pronto la población volverá a salir con más confianza porque se encuentra inmunizada.

Los restaurantes han encontrado un respiro. Sin duda han sido afectados como todo el comercio por la pandemia.