La obra de la poeta y narradora fue comentada por Lucía Melgar, dentro del ciclo de charlas: “En busca de una literatura propia. Narradoras latinoamericanas”
El foro es organizado por la Fundación para las Letras Mexicanas, en coordinación con la UV y la UANL
Lucía Melgar habló de la vida y obra de Cristina Peri Rossi
Lucía Melgar habló de la vida y obra de Cristina Peri Rossi
Claudia Peralta Vázquez
17/04/2021, Xalapa, Ver.- En la década de los sesenta, Cristina Peri Rossi, quien ha sido una escritora comprometida con el cambio social y cultural de su país, transgredió varias normas relacionadas con la feminidad, orientación sexual y su rol de intelectual de izquierda, lo cual ha plasmado en sus obras.
Así calificó Lucía Melgar, profesora e investigadora mexicana, el transcurrir de la vida de la poetisa y crítica literaria nacida en Montevideo, Uruguay, en 1941, pero exiliada de esa nación a principios de los setenta.
Esta reflexión tuvo lugar el 8 de abril dentro del ciclo de charlas “En busca de una literatura propia. Narradoras latinoamericanas”, organizado por la Fundación para las Letras Mexicanas en coordinación con la Universidad Veracruzana (UV) –a través del Área Académica de Humanidades (AAH) y la Facultad de Letras Españolas– y la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL).
Con dicho foro, transmitido cada jueves por YouTube y Facebook, a partir del 11 de febrero y hasta el 6 de mayo, desde la Casa Estudio Cien Años de Soledad, se busca acercar de manera gratuita el saber literario a todo tipo de lectores, y poner en un primer plano la escritura y legado de importantes autoras de la cultura latinoamericana.
Por ello, dentro de la octava sesión del encuentro, Lucía Melgar abordó la amplia y variada obra de la poeta y narradora Cristina Peri Rossi, quien desde los años setenta vive en Barcelona, España, tras su exilio.
Aunque sus creaciones han pasado por diferentes etapas y no es tan conocida en varios círculos, decidió referirse a ella en este ciclo de charlas precisamente por la importancia del tema del exilio que comparte con otros autores latinoamericanos, aunado a su personalidad y literatura propia.
En su libro Cuando fumar era un placer, Peri Rossi narra el impacto que tuvo, en la década de los cincuenta, al ver a una mujer en un café de Montevideo, vestida con pantalones y un cigarrillo.
Como adolescente pensó que quería ser así, pues representaba la idea de no pertenecer y acoplarse a los roles de la feminidad vigentes en una sociedad que era tradicional y provinciana en muchos sentidos.
Desde su juventud supo que era lesbiana, por lo que nunca aspiró al matrimonio ni a concebir hijos. “Ella decidió ser lo que no era”, no quería ser una mujer reprimida, amargada ni enojada con la vida.
Esa fue una decisión muy valiente que la llevó a publicar un poemario lésbico en 1971, que causó un tremendo escándalo en Montevideo y en su grupo familiar. Por esa razón se dice que transgredió varias normas sociales: la feminidad; la orientación social que no era aceptada en esa época; y ser una mujer de izquierda intelectual.
La poetisa y crítica literaria nacida en Montevideo, Uruguay, fue exiliada a principios de los años setenta
La poetisa y crítica literaria nacida en Montevideo, Uruguay, fue exiliada a principios de los años setenta
Con 23 años, Peri Rossi, hija de una maestra que alentó sus estudios de literatura, empezó a publicar crítica literaria en el suplemento cultural del periódico El popular del Partido Comunista, aun sin ser simpatizante de ese grupo político. Después participó en la revista Marcha, donde Ángel Antonio Rama Facal era el director literario.
La época de los sesenta fue fundamental en términos de la crítica literaria que se hacía en Marcha, pues se buscaba crear lectores informados y cultos que pudieran entender e interesarse en la literatura contemporánea.
“No hay una idea de literatura nacional, sino de literatura latinoamericana.”
En esta revista, Peri Rossi era una escritora comprometida con el cambio y se asumía como parte de una generación de jóvenes que querían una sociedad justa y no autoritaria, abierta y transgresora de las normas impuestas, no sólo en términos políticos sino también de la familia y sexualidad.
Como parte de su discurso, Lucía Melgar destacó que también fue una autora preocupada por las condiciones de las mujeres de Uruguay, uno de los primeros países de Latinoamérica donde iniciaron los movimientos feministas y considerado un referente cultural.
Narró que ante el inicio del periodo autoritario que se dio tanto en su país como en Argentina, anterior al golpe militar, la escritora participó en movimientos de resistencia al autoritarismo y fue una de las víctimas de la censura.
En 1973 perdió la nacionalidad y fue exiliada por haber dado refugio a un estudiante secuestrado, por lo que tuvo que abandonar su casa y biblioteca con más de tres mil ejemplares de libros.
En condición de apátrida, y con ayuda de su amigo entrañable Julio Cortázar, primero viajó a Francia, pero posteriormente decidió vivir en Barcelona, España, donde se unió a grupos antifranquistas e intelectuales, en particular con una revista llamada Triunfo.
Sin embargo, su compromiso con su país se mantuvo porque siempre quiso dar a conocer lo que era la dictadura.
En España, recibió la nacionalidad después de casarse con un hombre que por suerte era gay, decía, ceremonia que consumó un sacerdote de izquierda.
La ponente mencionó algunas de las obras de la escritora homenajeada en este encuentro literario, entre las que se encuentra su más reciente autobiografía Insumisa, publicada en 2019, un título por cierto oportuno para entender la cultura literaria y escritura de Peri Rossi, resaltó.
Asimismo, citó otros cuentos y novelas, entre ellos: Viviendo, Indicios pánicos, El libro de mis primos, La rebelión de los niños, El amor es una droga dura y Los museos abandonados. Por este último recibió un premio de la Editorial Arca.