/Yamiri Rodríguez Madrid /
La semana pasada aparecieron perdidos en Coatepec, dos carteles contra el diputado federal priista, José Francisco Yunes Zorrilla en los que lo acusan de traidor a la patria por haber votado en contra de la reforma eléctrica. El primero, una hoja bond doble carta que duró solo unas horas ahí, estaba en la parte baja de un poste de una esquina de la calle Jiménez del Campillo; el segundo, en otra esquina de la calle Centenario.
Morena ya había advertido que iniciaría una campaña distrito por distrito contra los legisladores que echaron abajo la propuesta presidencial. Lo que llama la atención es que, si es el propio partido del Movimiento de Regeneración Nacional quien está financiando los carteles, está muy pichurriento su presupuesto donde solo les alcanzó para poner dos en un municipio donde habitan más de 94 mil personas y, para colmo, mal ubicados.
Y si es un “entusiasta” como la asociación que pintó las bardas previo y posterior a la consulta de revocación de mandato, habría que entonces citarlo a cuentas por parte de las autoridades electorales, pues son acciones que en nada abonan a la democracia.
Lo cierto es que al legislador priista no le quita en lo mínimo el sueño ni tampoco le hace mella la campañita en su contra, por eso hace unos días estuvo precisamente en su distrito, recorriendo las localidades de La Libertad, Los Molinos y Tenextepec, todas estas en Perote, así como en Puerto Rico, Tuzamapan, Pacho Viejo y Las Lomas, en Coatepec, poniendo ejemplo de que trabajo mata grilla.
De los 20 distritos federales en Veracruz, solo dos están en manos de la oposición: Coatepec y Veracruz; tanto Pepe Yunes como la panista Marijose Gamboa se mantuvieron firmes en su postura y no retrocedieron ante la amenaza de linchamiento electoral. La congruencia, al final, rinde frutos.
@YamiriRodriguez