Sismos en el Gabinete

Gente Como Uno .

/ Mónica Garza /

“Me voy con la mano tendida, la puerta de mi casa siempre abierta y el corazón mío receptivo para ti y para Beatriz”, dijo el jueves pasado durante la conferencia mañanera, Tatiana Clouthier al Presidente López Obrador cuando leyó su carta de renuncia como secretaria de Economía, aunque la nota se la llevó el lenguaje corporal de ambos al despedirse, con el abrazo rechazado del presidente, que evadió simplemente no dejando de aplaudir.

Ella ya no regresó a su asiento. Salió de Palacio y apresurada se limitó a confirmar que ya no pertenecía a la actual administración, cuando un hombre intentó detenerla para expresarle una necesidad como extrabajador del Inegi, y recibió por parte de ella un tajante “ya no trabajo en el Gobierno”.

Tatiana Clouthier fue pieza clave en la campaña presidencial de AMLO, entró en relevo de Graciela Márquez Colín en diciembre de 2020, quien dejaba la Secretaría de Economía para ocupar un lugar en la Junta de Gobierno del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, un cargo menor al que tenía y que generó suspicacias sobre diferencias con el titular del Ejecutivo.

La Secretaría de Economía suma dos cambios de titular en lo que va de esta administración y Clouthier se ha convertido en la cuarta secretaria de Estado que abandona el gabinete.

“Uno debe saber, como en el juego, cuándo retirarse… mi oportunidad de sumarle al equipo está agotada”, expresó contundente en su texto.

Algunas diferencias entre la hoy exsecretaria y la actual administración se advirtieron desde el 2018, cuando aún como vicecoordinadora de Morena en San Lázaro, cuestionó la creación de la Guardia Nacional, rechazando la idea de la militarización en México desde entonces.

Claramente conmovida, Tatiana Clouthier se mostró cuidadosa y afectuosa en su despedida, de una administración que ha sufrido ya cerca de 40 cambios en su gabinete legal y ampliado.

Tatiana Clouthier, en una fotografía de archivo.
Tatiana Clouthier, en una fotografía de archivo.Foto: Cuartoscuro
En mayo de 2019 Germán Martínez renunció a la titularidad del IMSS difundiendo un texto demoledor: “Algunos funcionarios de la Secretaría de Hacienda tienen una injerencia perniciosa en el IMSS y ponen en riesgo la vocación igualitaria y de justicia”, “En el IMSS no se desobedece al presidente. Solo creo que el eje de su reforma deben ser las personas que se atienden y no los funcionarios que trabajan (ahí)”, escribió.

Dos meses después, se dio la salida —no menos estridente— de Carlos Urzúa Macías de la Secretaría de Hacienda, quien tampoco se reservó mucho al publicar sus argumentos: “Me resulta inaceptable la imposición de funcionarios que no tienen conocimiento de la hacienda pública”, “Discrepancias en materia económica hubo muchas. Algunas de ellas porque en esta administración se han tomado decisiones de política pública sin el suficiente sustento” sentenció.

Para las mujeres integradas al Poder Ejecutivo Federal, el 19 de junio de 2020 fue especialmente complicado con las renuncias de Mónica Maccise al Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación, Asa Cristina Laurell a la Subsecretaría de Integración y Desarrollo del Sistema de Salud, y Mara Gómez Pérez, de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas.

Para septiembre de 2020, Jaime Cárdenas Gracia quien llevaba poco más de 100 días siendo el segundo director del Instituto Nacional para Devolver al Pueblo lo Robado, renunció señalando en una larga carta, que dentro de la dependencia había actos de corrupción del personal, que habían sido denunciados ante la FGR:

“…mutilación de joyas, contratos favorables a las empresas y no al Indep, y conductas de servidores públicos contrarias a las normas”, señaló.

Incluso en la Comisión Nacional de Derechos Humanos hubo bajas que anunciaban la compleja realidad del organismo; los visitadores primero y sexto, José Martínez y Edgar Sánchez, advirtieron aquel agosto de 2020 que la CNDH estaba en peligro de perder su autonomía por presiones del partido en el poder.

El fenómeno se ha advertido incluso en el legislativo, donde hay quienes llegaron junto con la 4T a Morena y luego declinaron su pertenencia por diferencias irreconciliables, ahí nuevamente el caso de Germán Martínez y la siempre polémica Lilly Téllez, estrenada como legisladora para esta administración y quien hoy tiene en ella quizá a su más dura detractora.

Hasta diciembre de 2021, se contabilizaban 16 mujeres en el gabinete del Presidente López Obrador que habían renunciado a sus cargos de alto nivel, siendo las más recientes Olga Sánchez Cordero como secretaria de Gobernación y Delfina Gómez Álvarez, aunque esta última para efectos electorales.

Esta semana Tatiana Clouthier, considerada como una de las incondicionales, se sumó a la lista de los que abandonan el barco, justo en estos momentos cruciales para la economía del país y para la política, que ya claramente va dosificando hasta los abrazos…