24/11/2022/ Cimac Noticias.com/ Ciudad de México.- «Seamos hombres distintos», es el nombre que dio el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) a una nueva campaña lanzada recientemente, la cual, para su difusión tiene una inversión de alrededor 24 millones de pesos. Pero ¿realmente contribuirá en erradicar el machismo y la violencia contra las mujeres?
Por primera vez en su historia Inmujeres lanzó una campaña dirigida a los hombres, con el objetivo de “concientizar sobre la violencia que afecta no sólo a las mujeres, sino al género masculino”, señaló el Instituto en un comunicado.
Durante la presentación, la presidenta del Inmujeres, Nadine Gasman Zylbermann, explicó que esta campaña tiene la intención de “hacer un llamado a los hombres” y la consideró como “una invitación a reflexionar cómo el modelo de masculinidad tradicional les afecta y nos afecta a la sociedad en conjunto”.
¿Un hombre que acosa, golpea o un feminicida se cuestionará cómo ser un hombre distinto al ver esta campaña?
Educación como medida de prevención
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) Mujeres señala que para prevenir la violencia es importante centrar la educación en la primera infancia, priorizando relaciones respetuosas. Además, se detalla como necesario incursionar en estos programas no solo en medios de comunicación, también en la industria del deporte y el mundo laboral.
En lo anterior coincide la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), quienes señalan que la atención y educación de la primera infancia constituye “una de las mejores inversiones que un país puede emprender con miras a favorecer el desarrollo de sus recursos humanos, la igualdad entre los sexos y la cohesión social, y a reducir el coste de los programas de recuperación posteriores”.
El organismo añade que la primera infancia se define como un periodo que va del nacimiento a los ocho años de edad y constituye un momento único, pues las niñas y los niños reciben con mayor influencia la información de sus entornos y contextos, esto incluye los estereotipos basados en el género y las acciones violentas que observa.
En este sentido surge como un camino obvio la necesidad de que los gobiernos se preocupen por emprender programas o planes de estudio que incorporen temas sobre machismo, estereotipos, los distintos tipos de violencia, las desigualdades entre mujeres y hombres, consentimiento y respeto a los derechos humanos.
Sin embargo, la actual administración no ha incluido dichas enseñanzas en sus planes de estudio. Apenas en julio de 2022, Nadine Gasman, en entrevista con El Universal, detalló que Inmujeres trabaja junto a la Secretaría de Educación Pública (SEP) para desarrollar nuevo contenido en los libros de texto en los que se incluyan temas que promuevan la igualdad y reduzcan la violencia contra las mujeres. Desde esa fecha hasta ahora, no se ha dado a conocer más información al respecto.
En tanto, Inmujeres enfoca sus esfuerzos en campañas como «Seamos hombres distintos«, donde solo indica a los hombres las acciones que deben dejar de reforzar, sin profundizar en por qué estas acciones perpetúan el sistema patriarcal que ha sido la principal razón de que la violencia feminicida incremente en el país.
El costo de “intentar” erradicar el machismo
24 millones de pesos del erario público costará la difusión de dicha campaña. En medio de un panorama en el que ya es bien conocida la reducción al presupuesto para atender la violencia contra las mujeres.
El 8 de noviembre, la Cámara de Diputados aprobó en lo general el Presupuesto de Egresos de la Federación 2023 (PEF 2023). Al respecto, Cimacnoticias advirtió que más de la mitad del dinero presupuestado en el anexo 13 del PEF 2023 estará destinado a los programas sociales creados por Andrés Manuel López Obrador.
Sin embargo, ninguno de estos programas está diseñado con perspectiva de género y tampoco tiene como población objetivo exclusivamente a las mujeres.
De ellos, el que se lleva la mayor cantidad de inversión es el programa de pensión para adultos mayores, el cual tiene un presupuesto de más de 190 mil millones de pesos por sí solo. Mientras que los recursos destinados a la atención, prevención y erradicación de violencia y de discriminación, entre los que se encuentran el Programa de Apoyo para Refugios Especializados para Mujeres Víctimas de Violencia de Género, sus hijas e hijos; Fortalecimiento de la Igualdad Sustantiva entre Mujeres y Hombres y otros siete programas más, deberán repartirse poco más de mil 900 millones de pesos.
En ese sentido, Inmujeres detalló que únicamente para difusión de la campaña «Seamos hombres distintos» se desembolsaron más de 20 millones de pesos; sin embargo, se desconocen los costos de producción de dicho contenido. Lo cierto es que la duda quedará: ¿Esta cantidad pudo beneficiar a una (o más) mujer que vive en un refugio tras haber intentado ser asesinada?
