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/Darío Pale y Redacción/
28,02.2023. Veracruz, Ver.- El feminicidio que se registró el pasado lunes en Orizaba en contra de la maestra Verónica Fernández Trujillo, de 35 años de edad y quien fue baleada por una mujer no identificada, el gobernador del estado Cuitláhuac García Jiménez aseveró que la línea de investigación que se sigue es “pasional”.
El Jefe del ejecutivo estatal insistió en que el móvil es el de un crimen “pasional” y hay un detenido, además de que ya se tiene identificada a la presunta responsable de este hecho, es decir, confirma que quien disparó fue una mujer.
“Sobre el lamentable homicidio de Verónica F.T. en Orizaba, se tiene identificada a la presunta responsable y la línea de investigación apunta a un móvil pasional”, señaló ante la prensa Jarocha.
En la mesa de seguridad, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez, precisó que los indicios recabados permitirán dar con la responsable material e intelectual.
Confirmó que el detenido es el presunto cómplice, presuntamente quien la podría haber auxiliado en su huida, y en este caso como en los otros acontecidos en días recientes, dijo, “se hará justicia”.
El mandatario estatal incurre en uno de los tantos errores para evitar nombrar que se trata de un feminicidio.
El llamado “crimen pasional”, epílogo de muchas relaciones de pareja, es el homicidio cometido en la abrumadora mayoría de las veces por un hombre o mujer, en contra de su pareja femenina, bajo la falsa idea de que es un acto imprevisible e incontrolable, orillado por fuerzas ocultas, y no el desenlace de una vida de violencia, construida desde la estructura de la sociedad.
Son las bajas pasiones que despiertan las mujeres las que orillan a sus parejas o a sus conocidos a cometer atroces crímenes.
Los medios de comunicación reportan con frecuencia estos homicidios que, al ser catalogados como “pasionales” por las autoridades judiciales, eclesiásticas o por la sociedad en su conjunto, dejan entendido que todo está suficientemente claro, explícito y que nada más hay que investigar.
Excesivo amor, dicen poetizando el crimen, y sirve de atenuante para la culpabilidad, explica Myriam Jimeno, en su texto Crimen pasional: con el corazón en tinieblas, publicado por el Centro de Estudios Sociales de la Universidad Nacional de Colombia, en 2001.
Se justifica la saña con que se comete, lo inerme de la víctima, pues se cree que algo dentro del homicida lo orilló a cometer el crimen. Se piensa que no representa ningún peligro social y se le debe considerar de manera benigna, casi como si fuera la víctima. Es, dice Myriam Jimeno, como si en el interior del criminal habitaran las fuerzas oscuras del miedo, la cólera y la pasión. Y entre la fuerza incontenible de esas emociones aconteciera el crimen.
Como se informó maestra del Centro de Atención Múltiple (CAM) número 15, Verónica fue asesinada este lunes al salir de su trabajo y abordar su automóvil, el cual se encontraba estacionado afuera de la escuela sobre calle Álvaro Obrero, casi esquina con Emiliano Zapata, de la colonia Benito Juárez de la ciudad de Orizaba y las cámaras de vigilancia captaron a una mujer, huyendo del lugar.
