Timothy se lanzó a la aventura sin pensar que un milagro lo salvaría del punto del no retorno.

Esta es mi aventura en el Pacífico a bordo de un pequeño catamarán de 30 pies solo conmigo y una pequeña amiga canina local mexicana llamada Bella. Comenzamos nuestra aventura escondiéndonos en un agujero de huracán en Puerto Vallarta en agosto de 2021.
Planeamos navegar por la costa mexicana y más allá hasta el próximo año. Una vez que aprendamos las cuerdas, tomaremos decisiones sobre futuros viajes dependiendo del hombre, Dios y la naturaleza.

 

Asi iniciaba su aventura Timothy y la perrita que lo adoptó y este martes culminó con su rescate el pasado jueves tras tres meses de estar a la deriva en alta mar.

Un hombre originario de La Paz, Baja California, partió en su catamarán “Aloha Toa” hacia la Polinesia Francesa en abril Sin embargo, un mes después de iniciar su travesía, se vio enfrentado a una tormenta intensa que arruinó todos los dispositivos electrónicos a su disposición.

Desprovisto de comunicación, el hombre, identificado como Tim, tuvo que encontrar una forma de sobrevivir y asegurar la supervivencia de su compañera canina, Bella. En una entrevista con 9News, reveló que durante los dos meses de naufragio se alimentaron de pescado crudo y bebieron agua de lluvia para sobrevivir.

oportunamente, Tim llevaba equipo de pesca, lo que les facilitó obtener alimento ocasionalmente después de la tormenta. Además, tuvieron que protegerse del sol y las altas temperaturas para evitar la deshidratación, refugiándose bajo la cubierta del pequeño catamarán.

Mike Tipton, profesor de fisiología de la Universidad de Portsmouth en el Reino Unido, explicó que sin esa protección, Tim habría estado expuesto a quemaduras solares graves y habría tenido dificultades para regular la temperatura corporal, ya que podría llegar a sudar hasta uno o dos litros por hora.

El rescate de Tim y Bella fue resultado de la suerte, ya que fueron avistados por casualidad desde un helicóptero. Durante el fin de semana, un helicóptero que acompañaba a un barco atunero del Grupo Empresarial Grupomar dividió la embarcación de Tim en alta mar. Según los informes, se encontraron a más de 1,200 millas náuticas del puerto más cercano.

Ante el avistamiento, la tripulación del barco atunero llevó a cabo las acciones necesarias para rescatarlos y brindarles atención de emergencia. Después de una evaluación médica, se informó que tanto Tim como Bella tenían signos vitales normales, a pesar de las difíciles condiciones en las que se encontraron.

Inmediatamente después del rescate, la tripulación de Grupomar contactó a las autoridades y coordinó los protocolos correspondientes con la Secretaría de Marina (Semar) y la Embajada de Australia para facilitar el regreso de Tim y Bella a su hogar lo antes posible.