* Desde la reforma del PJF en 1995 no había un desaire de tal naturaleza en la división de poderes. Procedimiento de ordenación del poder de autoridad que busca el equilibrio y armonía de fuerzas.
13.12.2023 Ciudad de México.- El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció este miércoles que no asistirá al informe de la ministra presidenta de la SCJN, Norma Piña y que en su lugar asistiría la titular de la SEGOB, Luisa María Alcalde.
Se trata de la primera ocasión que un Jefe del Ejecutivo no asista al informe del Poder Judicial, además alegando una falacia para justificar su inasistencia sobre si viaje a Acapulco cuando se conoce que a más de tres meses del impacto devastador del meteoro Otis, no ha recorrido una sola vez la zona cero o comunidades aledañas también arrasadas por los vientos huracanados.
De acuerdo a su narrativa por la tarde acudirá a “Acapulco” para una nueva reunión evaluatoria sobre los avances en la atención de los damnificados a quienes prometió pasarían una navidad muy alegre.
En medio de la basura que sigue en las calles de Acapulco y protestas de damnificados que alegan discriminación y exclusión de los “promotores de la nación de la 4t en la entrega de apoyos en una ciudad con problemas de telefonía y energía eléctrica, adelantó que la próxima semana se realizará nuevamente la conferencia en el puerto para informar sobre el avance en las tareas de reconstrucción, cuando la vez anterior se dio la transmisión en el bunker naval y no en el puerto frente a las y los damnificados.
El Poder Judicial Federal (PJF) aclara que no es obligatoria la presencia del primer mandatario
en el informe de labores, aun cuando haya sido una regla de oro en el marco de la división de Poderes y que desde 1995 no ha ocurrido que un presidente de la Republica falte a la rendición de cuentas del poder Judicial.
El artículo 14 de la Ley Orgánica del PJF establece que quien presida el máximo tribunal, en este caso Norma Piña, debe rendir ante las y los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, así como las y los miembros del Consejo de la Judicatura Federal, al finalizar el segundo período de sesiones de cada año, el informe de labores del Poder Judicial de la Federación”, por lo que destacan, la invitación a los demás poderes se trata de una cortesía.
El desaire de Andrés Manuel López Obrador es uno más al poder Judicial que no ha sido invitado a ceremonias donde la representación de los tres poderes era una mensaje de unidad. Incluso AMLO dejó de invitar y/o ni les saludaba, como ocurrió con el representante del Poder Legislativo cuando Santiago Creel era Presidente de la mesa directiva, sólo por ser de la oposición.
Además el irrespeto de mandar a la titular de la desmantelada SEGOB se agrega a los ataques sistematicos a la ministra Piña, desde que en la ceremonia por el aniversario de la Constitución en febrero pasado, la Presidenta de la Judicatura Norma Piña no se puso de pie cuando López Obrador entró al Teatro de la República, motivo por el cual no la ha dejado de descalificar y hostigar, tanto en la mañanera como en los grupos que controla Presidencia y Morena para hostigar a la oposición en México .
Para juristas el menosprecio presidencial se trata de un nuevo golpe contra la división de poderes Procedimiento de ordenación del poder de autoridad que busca el equilibrio y armonía de fuerzas mediante una serie de pesos y contrapesos. La división tradicional se ha basado en la existencia de tres poderes: Ejecutivo, Legislativo y Judicial, que se justifican por necesidades funcionales y de mutuo control.
Además, en los sistemas democráticos se concibe como un complemento a la regla de la mayoría, ya que gracias a él se protegen mejor las libertades individuales. Los formuladores de la teoría de la división de poderes son John Locke y Charles Louis de Secondat (Montesquieu). Ambos parten de la necesidad de que las decisiones no deben concentrarse, por lo que los órganos del poder han de autocontrolarse a través de un sistema de contrapesos y equilibrios.