* La ONG Jalisciense fue reconocida con el Premio Internacional de Derechos Humanos.
14.03.2024.- “¡Jalisco es una fosa, México es una fosa!”, exclamó entre el reclamo y el dolor María Guadalupe Aguilar, una madre buscadora que acudió a la ceremonia del Premio de Derechos Humanos Rey de España y participó con un emotivo discurso donde quiso dar a conocer al mundo lo que ocurre en México.
En la ceremonia realizada el miércoles, la organización no gubernamental (ONG) Familias Unidas por Nuestros Desaparecidos Jalisco (FUNDEJ), en contraste con lo que les sucede en el país México, donde se les persigue, se les criminaliza, se les asesina, se les engaña y no son recibidas ni por el Presidente Andrés Manuel López Obrador, la ONG fue galardonada con el prestigioso Premio de Derechos Humanos Rey de España, entregado por su Majestad Felipe VI.
Durante su participación, el monarca elogió la valentía de las familias que luchan por encontrar a sus seres queridos desaparecidos en México, expresando su respaldo a esta labor “tan necesaria” dijo al reconocer las madres y buscadores mexicanas que hacen una labor social tan riesgosa y dolorosa.
“En la unión y la justicia colectiva radica nuestra mayor fortaleza”, afirmó el rey Felipe durante su discurso en la Universidad de Alcalá de Henares, en Madrid, donde se llevó a cabo la entrega del galardón, organizada conjuntamente con el Defensor del Pueblo.
FUNDEJ surgió en el año 2013, fundada por siete madres buscadoras, entre ellas María Guadalupe Aguilar, quien estuvo presente en el evento junto con otras tres representantes de la organización. Su objetivo inicial fue localizar a sus familiares desaparecidos, y actualmente cuenta con la participación de casi 600 familias decididas a encontrar a sus seres queridos.
En México, se estima que hay alrededor de 110,000 personas desaparecidas, y en Jalisco, aproximadamente 15,000, lo que convierte a este estado en el quinto con mayor número de desaparecidos en el país, con lo que dicen la fosa más grande a novel nacional con más de 200 cuerpos que compite con las de Veracruz.
El monarca español elogió la perseverancia y el coraje de entidades como FUNDEJ, destacando que estas organizaciones “no permanecen indiferentes ante la adversidad”. Asimismo, resaltó que la desaparición de una sola persona mina la confianza en las instituciones y desafía la conciencia colectiva.
Tras recibir el premio de manos de Felipe VI, María Guadalupe Aguilar pronunció un conmovedor discurso, denunciando la grave situación en México. Exigió a las autoridades una mayor voluntad política y cooperación internacional para poner fin a esta lacra y localizar posibles fosas donde puedan encontrarse desaparecidos.
Con motivo de la entrega del galardón, cuatro integrantes del FUNDEJ se desplazaron hasta Alcalá de Henares. Una de ellas fue María Guadalupe Aguilar, fundadora y actual coordinadora del colectivo: “Una terrible pesadilla me ha traído un sueño esperanzador y, es por ello, esta mezcla de sentimientos”, inició su discurso.
¿¡México es una fosa!
la madre buscadora Maria Guadalipe Aguilar repasó la labor del FUNDEJ a lo largo de sus 10 años de vida: “Estos años hemos colaborado directamente en la creación de la Ley General de Víctimas, en la creación de una fiscalía especializada para desapariciones y en las comisiones estatales de búsqueda y de víctimas”, definió.
Incidió además en la “crisis forense a la que se enfrenta el país desde 2018”. Tal y como aseguró, “los restos encontrados en las fosas clandestinas no caben” en los espacios forenses en los que se debería realizar su identificación. “¡Jalisco es una fosa! ¡México es una fosa!”, denunció a gritos la activista.
FUNDEJ destinará los 25,000 euros del premio a la creación de un laboratorio forense para contribuir a la identificación de las víctimas, aunque Aguilar enfatizó que “cambiaría todo por el pasado” y recuperar a su hijo. Con determinación y dignidad, prometió seguir buscando, impulsada por el amor de madre que la lleva a buscar a sus hijos incansablemente.
El Defensor del Pueblo español, Ángel Gabilondo, subrayó que “cuando alguien desaparece, no desaparecen sus derechos” y que el término “desaparecido” dice mucho más que “en paradero desconocido”, pues la violencia que supone desconocer la causa o las circunstancias de la desaparición lleva a un sentimiento de zozobra.
Entre los reconocimientos que han recibido Fundej se encuentran:
Premio Nacional de Derechos Humanos (2017)
Premio Ginetta Sagan de Amnistía Internacional (2018)
Premio María Látigo de la Red Internacional de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario (REDDIH) (2023)
Premio de Derechos Humanos Rey de España (2024)