Un equipo de científicos ha generado seis anticuerpos contra el virus Zika que podrían usarse para detectar y posiblemente tratar esta enfermedad transmitida por mosquitos que ha infectado a más de 1.5 millones de personas en todo el mundo.
Los anticuerpos “podrían tener una doble utilidad como herramienta de diagnóstico capaz de reconocer los subtipos del virus Zika y quizás desarrollarlos aún más para tratar la infección por este virus“, informaron el autor correspondiente, Ravi Durvasula, y sus colegas en un estudio publicado recientemente en la revista PLOS ONE.
El doctor Durvasula es profesor y director del departamento de medicina de Loyola Medicine y de la Loyola University Chicago Stritch School of Medicine. La primera autora es la doctora Adinarayana Kunamneni, profesora asistente de investigación en el departamento de medicina de Loyola.
El Zika se propaga principalmente por los mosquitos. La mayoría de las personas infectadas no experimentan síntomas o muestran síntomas leves, como erupción, fiebre leve y ojos rojos. Pero la infección durante el embarazo puede causar abortos involuntarios, mortinatos y defectos congénitos graves, como la microcefalia.
El virus Zika es un ejemplo de libro de texto de una enfermedad emergente que aparece rápidamente, haciéndolo a menudo en áreas remotas con poca o ninguna infraestructura de salud pública. Hasta el momento, no existe una vacuna o medicamento eficaz para tratar la enfermedad.
“El reciente brote del virus Zika es una crisis de salud con repercusiones mundiales“, subrayaron Durvasula, Kunamneni y sus colegas. “La rápida propagación de la enfermedad dentro de las regiones epidémicas, junto con la migración de personas infectadas, ha enfatizado la necesidad de herramientas diagnósticas y terapéuticas rápidas, robustas y económicas“.
Los anticuerpos podrían ser la clave para diagnosticar y tratar el virus Zika. Un anticuerpo es una proteína en forma de Y producida por el sistema inmunológico. Cuando un virus, una bacteria u otro patógeno invaden el cuerpo, los anticuerpos se unen a los antígenos asociados con el insecto y lo marcan para que el sistema inmunológico los destruya.
Usando una tecnología llamada pantalla de ribosomas, los investigadores generaron seis anticuerpos sintéticos que se unen al virus Zika. Los anticuerpos, que son baratos de producir, podrían usarse en una prueba simple de papel filtro para detectar el virus en el ambiente. (Si el papel de filtro cambia de color, el virus Zika está presente).
Debido a que el virus Zika está evolucionando, es útil tener seis anticuerpos diferentes. En el caso de que el virus mute, es probable que al menos uno de los anticuerpos aún coincida con el virus y, por lo tanto, aún pueda usarse en el diagnóstico y tratamiento.
Una prueba basada en anticuerpos para el virus del Zika probablemente sería barata y rápida, y por lo tanto podría usarse fácilmente para monitorear las poblaciones de mosquitos portadores de Zika. Si el virus está presente en un área, los funcionarios podrían responder intensificando los esfuerzos de reducción de los mosquitos. También podrían educar al público, especialmente a las mujeres embarazadas o que tienen la posibilidad de embarazarse, sobre cómo evitar las picaduras de mosquitos mediante la aplicación de repelente, el uso de pantalones largos y playeras de manga larga, eliminar el agua estancada, etc.
Los anticuerpos son “neutralizantes”, lo que significa que cuando se unen al virus Zika evitan que este infecte las células. Lo anterior, efectivamente, hace que el virus se vuelva inofensivo. La propiedad neutralizadora conduciría potencialmente al desarrollo de un medicamento que una mujer en riesgo podría tomar para evitar que el virus infecte a su feto.
Se requerirá más investigación que valide el potencial de los anticuerpos para diagnosticar y tratar el virus Zika, concluyeron los investigadores.