* Mantenía a las mujeres sometidas y reprimir brutalmente las protestas de mujeres de 2023 con ejecuciones y cárcel.
*Algunas localidades celebran con fuegos artificiales la muerte del llamado carnicero de Irán.
19.05.2024.- Un helicóptero que transportaba al presidente de Irán, Ebrahim Raisi, sufrió un “aterrizaje forzoso”, según informan los medios de comunicación estatales, y hasta hace unos minutos se informó de su localización.
Por el momento no están claras las razones del suceso ni se ha confirmado oficialmente el estado de Raisi ni de las otras personas que iban a bordo.
El hallazgo fue posible gracias a una señal del aparato y a otra del móvil de uno de los tripulantes y no se ha detallado el estado del mandatario
Sin confirmación oficial muchos medios de Irán, incluyendo la televisora estatal, ya están dando por hecho el fallecimiento del terrorista Ebrahim Raisi y su séquito genocida Hossein Amirabdollahian y Malek Rahmati.
La espesa niebla dificultó la búsqueda en el lugar donde se cree que pudo aterrizar el helicóptero, pero reportes periodísticos dijo que finalmente localizaron el helicóptero sin sobrevivientes a unos 50 km al norte de Tabriz, en el noroeste de Irán.
Según los medios locales, el presidente Raisi se dirigía hacia Tabriz tras regresar de la frontera con Azerbaiyán, donde inauguró las presas de Qiz Qalasi y Khodaafarin.
El Dictador Ebrahim Raisi era conocido por su participación en las ejecuciones masivas de 1988, cuando miles de prisioneros políticos fueron ejecutados en Irán. Raisi era miembro de las llamadas “comisiones de la muerte” que supervisaron estos eventos. Aunque las cifras exactas varían, se estima que entre 4,000 y 5,000 prisioneros fueron ejecutados durante ese período.
Además, durante su tiempo como jefe del poder judicial, se ha informò de numerosos casos de ejecuciones, torturas y otras formas de represión contra activistas, periodistas y minorías.
El dictador Raisi tenía 63 años, clérigo islámico de la línea más radical, que fue “elegido” presidente de Irán en 2021.
Durante la presidencia de Raisi, el gobierno enfrentó muchas protestas en su contra, luego de la muerte de la joven mujer kurda, Mahsa Amini, que estaba en custodia policial cuando fue asesinada, lo que movilizó al mundo. Las autoridades respondieron con una brutal represión en Irán, que incluyó asesinatos, encarcelamientos y tortura.
Apoyó a los servicios de seguridad del país en su represión de toda disidencia tras la muerte en 2022, en la prisión, de Mahsa Amini encarcelada por la “policía moral” por no llevar bien puesto el velo y las protestas que siguieron en todo el país.
La represión, que duró un mes, causó más de 500 muertos y más de 22 mil detenidos. En marzo, un grupo de investigación de las Naciones Unidas concluyó que Irán era responsable de la “violencia física” que condujo a la muerte de Amini tras su detención por llevar el hiyab, o pañuelo en la cabeza, mal puesto, según el gusto de sus autoridades.
Raisi es conocido como “El Carnicero de Irán” por asesinar a miles de inocentes.
El presidente Raisi viajaba con el ministro de Asuntos Exteriores iraní en un convoy de tres helicópteros que sobrevolaban la zona.
Ebrahim Raisi entró en sustitución de Hassan Rouhani, un político más moderado, que lo había derrotado en las presidenciales de 2017 y que, tras dos mandatos consecutivos, no pudo volver a presentarse.
¿Quién era?
El hoy presidente iraní es un clérigo ultraconservador y fue jefe judicial de dicha nación. El Centro de Derechos Humanos de Irán, así como organizaciones como Human Rights Watch y Amnistía Internacional lo han acusado de formar parte del “comité de la muerte” un grupo que supervisó la ejecución de, aproximadamente, cinco mil personas en 1988.
El político creció en el seno de una familia de clérigos persas descendiente del imán chií Husein y, por tanto, del profeta Mahoma, de ahí su turbante negro. Fue alumno del líder supremo en uno de los seminarios chííes de Qom y amplió más tarde sus estudios con un máster postgrado en Derecho Privado y con un doctorado en Jurisprudencia y Derecho Privado.
Con esa formación, entró en el mundo de la judicatura en la década de los 80. Primero fue fiscal de la ciudad de Karaj y, posteriormente, en la provincia de Hamedan, hasta que en el año 1985 dio el salto a la capital al ser nombrado sustituto del fiscal de Teherán.
En 1994 llegó a ser Jefe de la Agencia Nacional de Inspección. En lo que respecta al ámbito político, fue nombrado vicepresidente de la Corte Suprema en 2004 y, 15 años más tarde, en 2019, presidente de la misma institución, cargo que ocupó hasta 2021.
Asimismo, en 2016, el guía supremo Ali Jamenei lo colocó al frente de la poderosa fundación benéfica Astan Quds Razavi, que gestiona el santuario del Imán Reza en Mashhad además de un enorme patrimonio industrial e inmobiliario.
Casado con Jamileh Alamolhoda, profesora de Ciencias de la Educación en la Universidad Shahid-Beheshti de Teherán, con quien tuvo dos hijas, Raisi es yerno de Ahmad Alamolhoda, imán de la oración y representante provincial del guía supremo en Mashad, segunda ciudad del país.
Durante su período como jefe de Estado, Raisi trazó su estrategia para expandir la influencia regional de su país, apoyando militantes a lo largo y a lo ancho de Medio Oriente, acelerando el programa nuclear iraní, sospechado de perseguir el desarrollo de una bomba atómica, y llevando a al país al borde de una guerra con Israel
Raisi también apoyó un ataque masivo contra Israel en abril, en el que se dispararon más de 300 aviones no tripulados y misiles contra el país en respuesta a un presunto ataque israelí en el que murieron generales iraníes en el complejo de la embajada del país en Damasco, Siria. La mayor parte de los cuales fueron interceptados con la ayuda de Estados Unidos y de otros países aliados.
Esto supuso un recrudecimiento de la guerra en la sombra que ambos países mantienen desde hace años.