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03.10.2024.- Luego de que Claudia Sheinbaum Pardo, ofreciera disculpas a nombre del Estado Mexicano a las madres, padres y sobrevivientes de la masacre estudiantil ocurrida el 2 de octubre de 1968, hace 56 años, una serie de comentarios adversos y hasta insultantes se detonaron en cascada.
Fiel al pensamiento patriarcal que una mujeres serán más severamente juzgada en sus actos, las críticas se exacerbaron en columnas, redes, en el comité y en la conversación pública
Sheinbaum Pardo abordó el tema y aludió a los que visible y anónimamente se enojaron por lo que hizo, “Ayer hubo quien se molestó de la disculpa pública, es más enaltecieron a Diaz Ordaz, el colmo de los colmos”, reprochó.
“Lo de ayer fue muy importante, por supuesto tienen que seguir las investigaciones judiciales y todo lo que quieran presentar las víctimas, pero el Estado debe pedir perdón por atrocidades que cometió el Estado Mexicano y eso enaltece de nuevo a los pueblos a las naciones”, refrendó.
“Hace 56 años jóvenes como ustedes se manifestaban en las calles para que no hubiera represión y cómo les contestó el gobierno de entonces, con balas, eso es lo que no puede volver a ocurrir, por eso vamos a seguir insistiendo en ello”, enfatizó.
Acceso a la justicia
Pese a que previo a la conmemoración de un año más de aquel suceso, el Comité 68 Pro Libertades Democráticas confirmó que la Fiscalía Especial en Materia de Derechos Humanos (FEMDH), y la Fiscalía General de la República (FGR), reactivaron los procesos judiciales contra los perpetradores de delitos de Estado cometidos durante las luchas estudiantiles de las décadas de 1960 y 1970, esto reclamaron que le ofrecimiento de la disculpa era un pantalla pues no resuelve nada.
El comité demandó el acceso a la justicia, “No está demás insistir en la importancia de mantener la independencia judicial y el estado de derecho democrático como pilar de un estado soberano”.
“A 56 años del genocidio perpetrado en contra del Movimiento Estudiantil y Popular de 1968, sostenemos la lucha por las libertades democráticas, de manera enfática por el acceso a la justicia en los casos del 2 de octubre, del 10 de junio de 1971 y el periodo de contrainsurgencia denominado guerra sucia”, expusieron en diversas entrevistas.
