*Yo Campesino
* Gracias a Trump nuestro gobierno asume sus responsabilidades.
/ Miguel A. Rocha Valencia /
En menos de 40 minutos el presidente de Estados Unidos puso a trabajar a nuestras autoridades en sus responsabilidades para con los mexicanos respecto a seguridad y buen gobierno y como buenos vecinos habremos de cumplir o habrá sanciones.
Y es que fueron muchos años en que se dejó suelta a la delincuencia ya se por complicidad u omisión por lo que ahora veremos si la actual administración es capaz de sacudirse tutelas pasadas o asume su responsabilidad aprovechando la presión que desde el norte le están aplicando en todos sentidos.
Porque no sólo se trata de seguridad sino de crecimiento y desarrollo económicos donde gracias al presidente estadunidense, queda claro que en México se deben generar condiciones para que los mexicanos se queden y propicien riqueza en su propio país y no vayan a engordar el caldo a otras naciones presionados por la delincuencia o la miseria.
Es tiempo de asumir responsabilidades; el episodio que acaba de pasar y termina en un mes, es la oportunidad para evaluarnos a nosotros mismos y llegado el momento poder quitarnos de encima el chantaje que esta vez nos obliga no sólo a combatir al crimen sino a llevar soldados a la frontera norte para evitar que los migrantes intenten pasar al otro lado, especialmente de otras naciones.
Porque para esos migrantes no es atractivo quedarse en México donde viven lo mismo que nuestros connacionales en Estados Unidos, persecuciones, vejaciones, explotación y hasta esclavitud cuando caen en manos de las bandas criminales.
Y no es atractivo porque quisieran vivir como el estereotipo estadunidense, con universidades de primer mundo, casas vistosas, jardines para la carne asada y desde luego, auto y diversiones al “estilo americano”, cosas difíciles de alcanzar en un país como el nuestro lleno de carencias donde aspirar a una vida mejor es un pecado capital páranla 4T.
NO se trata de la codependencia comercial México-Estados Unidos, no se trata de aranceles ni de medidas donde todos perdemos sino de asumir responsabilidades de gobierno donde la caja de aplausos se vuelve recurrente cuando se cumple una obligación en vez de exigencia de superar expectativas…
Tampoco se trata de negociar prórrogas por algo que ya está acordado y que forma parte de la vecindad y los convenios sino de hacer la tarea propia, para eso se compite para gobernar, no de ostentar un poder para abusar de él como sucede en México.
Hay que exigir como sociedad a quienes nos gobiernan que lo hagan con el mejor de sus esfuerzos y no comprar felicitaciones y aplausos por su mediocre comportamiento sin resultados efectivos en educación, salud, trabajo y en suma, crecimiento…
Esta es una de las llamadas de atención más fuertes que hemos recibido, que llegado el momento podría endurecerse y que al final de cuentas, se deben agradecer para ver si los aspirantes a dictadorzuelos reaccionan, fortalecen la unidad nacional para el trabajo bajo las siglas de una democracia inclusiva donde todos tenemos un valor, algo que aportar al crecimiento de este país.
Para ello, es indispensable que la autoridad asuma su responsabilidad primordial de dar seguridad a quienes aquí vivimos para dedicarnos en libertad a lo que mejor nos convenga dentro de la ley, esa que es violada y parchada para bien del que manda y no para los gobernados.
Son tiempos no de festejos y regodeos en “miren lo que logré” sino de cumplir con el mandato de lo que queda de Constitución, se peleó por ello y se aceptó ante la representación nacional. No hay de otra deben generarse políticas públicas de verdad no populacheras para continuar en el poder sino para hacer de México un país fuerte que gracias a la fortaleza de todos se pueda validar su independencia frente a cualquier amenaza incluyendo la de los aranceles.
Eso es ser patriota, lo demás es puro “chocholeo”, primero está la responsabilidad con México y después con todo lo demás incluyendo profetas, caudillos o feligresías.
Porque quien hoy se encuentra en la Presidencia se comprometió con México no con un sujeto ni una gavilla sino con todo el país, se prometió inclusión y trabajo conjunto, de respeto a la ley y pareciera que todo eso se olvidó con la toma del poder. Ojalá cambiemos, que se asuma la primera magistratura que es en esencia servir a los demás. A todos por el bien de nuestra sociedad.