Infraestructura, gran reto de la Cuarta Transformación: AGEDI

* Países desarrollados invierten de 7 a 9% del PIB en infraestructura; México menos del 3%.

• A México le falta 90% de infraestructura para ser un país de Primer Mundo.

• AGEDI hizo un llamado a todas las instancias de gobierno para desarrollar una política que privilegie a las empresas nacionales
 
México 08 de noviembre 2019.- El presidente de la Asociación de Grúas, Equipos y Dispositivos Industriales (AGEDI), Carlos Salas Buz, señaló que México se encuentra en un momento muy complejo, un momento de cambios y grandes oportunidades, en el que uno de los retos más importantes para el Gobierno de la Cuarta Transformación es el de la infraestructura.
 
Al encabezar la inauguración del 5to Congreso Internacional de Grúas Industriales AGEDI 2019, que se lleva a cabo en el Hotel Hilton ‪Alameda de la Ciudad de México este 7‬, 8 y ‪9 de noviembre‬, Salas Buz destacó que a México le hace falta el 90% de la infraestructura que requiere un país de Primer Mundo.

No obstante, subrayó, en el gremio de las grúas industriales participamos en el 95% de los proyectos de infraestructura, estamos formados hasta adelante en una posición estratégica para poder colaborar en todos los proyectos de infraestructura que requiera México.
 
Llevamos 5 años capacitándonos e invirtiendo por lo que hoy le decimos a las entidades gubernamentales “aquí estamos”; AGEDI cuenta con el equipo técnico, humano y la infraestructura necesaria para hacer frente a estas actividades, destacó el líder nacional de AGEDI, Asociación compuesta por más de 110 miembros, entre los que destacan 80 empresas de grúas y 30 más de distintos distribuidores.
 
Este sector de la industria cuenta con más de 1800 grúas, genera más de 10 mil empleos directos, más de 10 mil empleos indirectos y tiene además a las empresas especializadas de transporte también dentro de la asociación, que suman más de 600 líneas modulares y más de 300 tractocamiones.
 
Somos un sector estratégico para el desarrollo en México. Un sector que con el transporte especializado y las grúas, hacemos que los proyectos de infraestructura se logren, destacó en el evento inaugural Salas Buz.
 
Acompañado por José Cano Pérez, vicepresidente de AGEDI; Elizabeth Barba Villafan, directora de Centros Metropolitanos Federales de la SCT, en representación de Salomon Elnecavé Korish, titular de la Dirección General de Autotransporte Federal; y Alejandro Salas Martínez, vicepresidente de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (CANACAR), en representación del presidente nacional de CANACAR, Enrique Armando González Muñoz, el presidente nacional de AGEDI aseguró que el gremio de las grúas industriales está preparado y listo para atender toda la demanda que se pueda generar para el sector en materia de infraestructura.
 
En este sentido hizo un llamado a las entidades gubernamentales para desarrollar una política en la que se apueste al nacionalismo a fin de que en estos proyectos se privilegie la participación de las empresas mexicanas, lo que les permitiría seguir invirtiendo en la modernización de su parque vehicular, en la adquisición de tecnología y capacitación de su personal.
 
Ese es el reto para Cuarta Transformación, aseguró Salas Buz, nos hemos dirigido a ellos y les hemos incluso mandado cartas a las diferentes Secretarías para levantar la mano y decirles “aquí estamos listos”.
 
En este contexto, fue el maestro Carlos Quijano, catedrático del Tec de Monterrey, el encargado de brindar la Conferencia Magistral ‘¿A dónde nos lleva el cambio?’, en la que abordó el tema del lugar en el que México se encuentra en materia de infraestructura en el plano internacional, así como el panorama para los próximos años.
 
De acuerdo con el maestro Carlos Quijano, según cifras proporcionadas por el Centro de Estudios Económicos de la Industria de la Construcción, basadas en datos del Foro Económico Mundial en Davos 2018, el nivel de competitividad en cuanto a infraestructura que México ocupó en 2017 por la calidad de su infraestructura fue el 57, descendiendo 5 lugares en 2018, situándose en el 62.
 
En cuanto a calidad de infraestructura carretera, es el único rubro en el que México no descendió entre 2017 y 2018, pasando del lugar 58 al 52, el único rubro en este ranking con crecimiento positivo.
 
Entre los 143 países evaluados en este estudio, en cuanto a calidad de infraestructura ferroviaria México bajó del lugar 58 al 65; en infraestructura portuaria del 61 al 67; en infraestructura eléctrica del 68 al 72; infraestructura aeroportuaria del 61 al 67; en telecomunicaciones del 65 al 67.
 
En lo que toca al comportamiento de la Inversión dentro del PIB en materia de infraestructura entre 2002 y 2017, Carlos Quijano explicó que de 2002 a 2009 hubo un crecimiento constante de inversión en el PIB en materia de infraestructura llegando a tasas del 5.5, desde donde empezó a decaer.
 
A partir de ahí llevamos ocho años consecutivos a la baja llegando hasta niveles de 2.5% para 2017, y se prevé que en 2019 se cerrará en 2.7%; para 2020 el cálculo es de 2.9%, lo cual nos sigue teniendo abajo del índice que deberíamos de tener, puntualizó el académico.
 
En el Índice Internacional de Competitividad, México se encuentra en el lugar 51 como país, pero en Competitividad en Infraestructura en el lugar 62, y en el rubro de Competitividad e Instituciones, que involucra a los gobiernos, ocupamos el lugar 123.
 
En este índice en materia de desarrollo tecnológico, México está en el lugar 63; en participación de mercado en competitividad, lugar 79; en infraestructura eléctrica 43; educación básica 79; educación superior 80; mercado de bienes 70; índice financiero 36, rubro en el que el mercado financiero es estable en México y es la mejor posición de competitividad de todos los indicadores que se miden.
 
En el top ten de competitividad están: Suiza, EU, Singapur, Holanda, Alemania, Hong Kong, Suecia, Reino Unido, Japón y Finlandia.
 
En infraestructura a nivel mundial los primeros lugares son Hong Kong, Singapur, Holanda, Japón, Emiratos Árabes, Suiza, Francia, Corea, EU, y Alemania. México ocupa el lugar número 62 en infraestructura.
 
En Latinoamérica Panamá, Chile, Uruguay y México ocupan los primeros 4 lugares en materia de infraestructura, sin embargo la economía de México es mucho más grande que cualquiera de estos países. No obstante, estamos mas atrás que estos países atrás a nivel global, donde Panamá está en el lugar número 37, Chile 41, Uruguay 45 y México 62.
 
La necesidad de invertir en infraestructura es indispensable para la calidad de vida de la población, vital para el desarrollo económico, para la competitividad y el crecimiento del economía en su conjunto.
 
Las economías desarrolladas invierten entre el 7 y el 9% del PIB en infraestructura cada año, aproximadamente tres veces más de lo que México invierte en este rubro.
 
En Latinoamérica se invierte en promedio el 5% del PIB en infraestructura. México invierte menos del 3%. En 2019 la inversión pública y privada en México se quedó a la espera de la inversión en proyectos para la liberación de recursos, pero ni el sector privado ni el público liberaron los recursos, lo que no ayudó a detonar el movimiento económico.
 
De acuerdo con el Centro de Estudios Económicos de la Industria de la Construcción, se estima que entre 2018 y 2030 en México, debería de haber una inversión en infraestructura cercana a los 74,000 millones de dólares.
 
Esta inversión se estima que se dividiría en una parte mayoritaria para el sector energético, integrado por el hidrocarburos, energía y energías alternativas, con más de la tercera parte, 31,000 millones de dólares en estos más de 10 años.
 
Para el rubro de transporte irían 8800 millones; aeropuerto 8000 millones; en materia de agua 7000 millones; en materia de puertos poco menos de 7000 millones; y de ahí entre 6000 y 7000 millones para ferrocarriles y telecomunicaciones.
 
Éste es el motor que puede detonar la economía mexicana y las economías de escala regional. No obstante, este año al estar México en un proceso en el que en la redefinición de elementos y temas no se dio, no se abrió la cartera lo que impidió que se lanzaran los proyectos.