En política avances pobres, en salud y educación hay avances
México entre los 85 países donde nunca ha gobernado una mujer
Soledad Jarquín Edgar
SemMéxico, Cd. de México, 16 de enero 2020.- Si bien México escaló a la posición 25 en el Informe Global de la Brecha de Género 2020 del Fondo Económico Mundial, aún existe una brecha importante en cuanto a su presencia como ejecutivas en las juntas directivas de empresas, donde ocupa el lugar 38. A nivel mundial, la paridad de género es del 68,6 % y los 10 países más bajos han cerrado solo el 40 % de la brecha de género.
En el mundo, señala el Informe Global de Brecha de Género 2020 el tiempo que llevará cerrar la brecha de género en política, economía, salud y educación se redujo a 99,5 años en 2019, esto es poco menos de 10 años de los calculados en 2018, ayudó la reducción de la brecha de género en política.
Los 99.5 años que quedan, de acuerdo con la prensa del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés), nos llevará “más de una vida de distancia: el mundo enfrenta la espera de 100 años por la paridad de género”.
En todo el mundo en 2019, las mujeres ahora tienen el 25.2 % de los escaños parlamentarios en la cámara baja y el 21.2 % de los puestos ministeriales, en comparación con el 24.1 % y el 19 % respectivamente el año pasado.
En México, la Comisión Nacional de Derechos Humanos en el informe la Participación Política Equilibrada entre Mujeres y Hombres en México, 2019: Los desafíos de la reforma constitucional en materia de paridad, documenta que como resultado del proceso electoral 2018, el 48.2 % de las diputaciones federales están ocupadas por mujeres, en tanto que la Senaduría está conformada por el 49.22 % de mujeres, ambos casos considerados como “históricos”.
La política, sin embargo, -dice el Informe Global de Brecha de Género 2020- sigue siendo el área donde menos progreso se ha hecho hasta la fecha. Con el logro educativo y la salud y la supervivencia mucho más cerca de la paridad en el 96.1 % y el 95.7 % respectivamente, el otro campo de batalla importante es la participación económica. Aquí, la brecha se amplió en 2019 de 58.1 % en 2018 a 57.8 %.
Mirando simplemente el progreso realizado desde 2006 cuando el Foro Económico Mundial comenzó a medir la brecha de género, esta brecha económica de género tardará 257 años en cerrarse, en comparación con los 202 años del año pasado.
Atribuye la brecha económica de género a una serie de factores. Estos incluyen tercamente bajos niveles de mujeres en puestos gerenciales o de liderazgo, estancamiento salarial, participación en la fuerza laboral e ingresos. Las mujeres han sido golpeadas por un triple golpe: primero, están más representadas en muchos de los roles que han sido más afectados por la automatización, por ejemplo, los roles de venta al por menor y de oficina.
En segundo lugar, no hay suficientes mujeres entrando en esas profesiones, a menudo, pero no exclusivamente impulsadas por la tecnología, donde el crecimiento salarial ha sido más pronunciado. Como resultado, las mujeres en el trabajo con demasiada frecuencia se encuentran en categorías de salarios medios-bajos que se han estancado desde la crisis financiera hace 10 años.
Tercero, factores perennes como la falta de infraestructura de atención y la falta de acceso al capital limitan fuertemente las oportunidades laborales de las mujeres. Las mujeres dedican al menos el doble de tiempo a la atención y al trabajo voluntario en todos los países donde hay datos disponibles, y la falta de acceso al capital impide que las mujeres realicen actividades empresariales, otro factor clave de ingresos.
La paridad de género tiene una influencia fundamental en si las economías y las sociedades prosperan o no. El desarrollo y despliegue de la mitad del talento disponible en el mundo tiene una gran influencia en el crecimiento, la competitividad y la preparación futura de las economías y empresas de todo el mundo, añade el informe del WEF.
Las clasificaciones del índice ofrecen un medio efectivo para evaluar el progreso. Están diseñados para crear conciencia global sobre los desafíos que plantean las brechas de género, así como las oportunidades que surgen cuando se toman medidas para reducirlos.
México, por cierto, está aún lejos del Top 10 de países que ocupan los primeros lugares al reducir la brecha de género, donde se encuentran: Islandia 0.877, Noruega 0.842, Finlandia 0.832, Suecia 0.820, Nicaragua 0.804, Nueva Zelanda 0.799, Irlanda 0.798, España 0.795, Ruanda 0.791 y Alemania 0.797. Un solo país Latinoamericano.
La comparación de los cambios en el empoderamiento político de 2006 a 2019 muestra que las mejoras en la representación política ocurrieron simultáneamente con las mejoras en las mujeres en puestos de responsabilidad en el mercado laboral.
Desigualdad de género en los trabajos del futuro
De acuerdo al Informe Global de Brecha de Género 2020 posiblemente el mayor desafío para evitar que se cierre la brecha económica de género es la escasa representación de las mujeres en los roles emergentes. Hay poca representación de mujeres en profesiones emergentes (como lo son las nuevas tecnologías de información) –de acuerdo con un estudio de LinkedIn, donde esta brecha es más pronunciada.
Por otro lado, el informe señala el Porcentaje de mujeres ejecutivas en las juntas directivas de empresas, donde sólo 10 países cuentan con una de cada tres ejecutivas en empresas: Francia 43.4 %, Islandia 43 %, Noruega 42.1 %, Suecia 36.3 %, Italia 34 %, Finlandia 32.8 %, Alemania 31.9 %, Bélgica 30.7 %, Dinamarca 30.3 % y Nueva Zelanda 30 %.
Le siguen 12 países donde, una de cada cinco mujeres ocupan cargos empresariales: Países Bajos 29.5 %, Letonia 28.8 %, Australia 28.7 %, Reino Unido 27.2 %, Canadá 25.8 %, Israel 23.1 %, Eslovenia 22.6 %, España 22 %, Estados Unidos 21.7 %, Sudáfrica 21.4 %, Suiza 21.3 % y Polonia 20.1 %.
Después ubica a 21 países donde, solo uno de cada 10 puestos empresariales son ocupados por mujeres, entre ellos se ubica México, sexto lugar de abajo para arriba:
Austria 19.2 %, Irlanda 17.6 %, Portugal 16.2 %, República Eslovaca 15.1 %, Colombia 15.1 %, Hungría 14.5 %, República Checa 15.1 %, Lituania 14.3 %, India 13.8 %, Turquía 13.4 %, Luxemburgo 12 %, Gracia 11.3 %, China 9.7 %, Brasil 8.4 %, Chile 8.2 %, México 7.5 %, Estonia 7.4 %, Federación Rusa 7 %, Japón 5.3 %, Indonesia 3.2 % y Corea 2.1.
En la lista de 43 países hay solo 6 países americanos.
Pese a ello, el informe del WEF sobre la brecha de género sostiene que México es uno de los cinco países que mejoraron junto con Albania, Etiopía, Malí y España
De los 149 países clasificados, 101 mejoraron sus puntajes en el índice de 2019 (esto excluye a los cinco nuevos países que se han unido a la clasificación este año).
Otros 48 vieron su rendimiento sin cambios, mientras que el percentil 10 superior vio sus puntajes mejorar más de 3.3% año tras año.
Un total de 35 países han alcanzado la paridad de género en la educación.
En salud, 48 países han alcanzado casi la paridad y 71 han cerrado al menos el 97% de la brecha.
La política ¿al alza?
Los puntajes de empoderamiento político son pobres. En términos de representación parlamentaria, las mujeres a nivel mundial han asegurado solo el 25 % de los puestos disponibles, una cifra que cae al 21 % a nivel ministerial. En este nivel, hay nueve donde no tienen representación.
En los últimos 50 años, 85 estados no han tenido jefas de estado. Entre ellos México.
En términos de participación económica, la brecha de género tardará 257 años en cerrarse (en comparación con 202 años en el informe de 2019).
A nivel mundial, solo el 55 % de las mujeres (de 15 a 64 años) participan en el mercado laboral, en comparación con el 78 % de los hombres.
Hay 72 países donde las mujeres tienen prohibido abrir cuentas bancarias u obtener crédito.
Las tendencias
Por regiones, Europa occidental ha realizado el mayor progreso en la paridad de género (situándose en 76.7 %), seguida de América del Norte (72.9 %), América Latina y el Caribe (72.2 %), Europa del Este y Asia Central (71.3 %), Sudáfrica sahariana (68,2 %), Asia meridional (66,1 %) y Oriente Medio y África del Norte (60,5 %).
Estas cifras, sin embargo, enmascaran varias tendencias clave, que tienen un impacto significativo en el tiempo para la paridad de género. En América del Norte, el progreso se detuvo durante 2019, mientras que más al sur, en América Latina y el Caribe, varios países tuvieron un gran desempeño en el transcurso del año.
http://www3.weforum.org/docs/WEF_GGGR_2020.pdf