Llaman a repensar la política de cuidados y dejar de feminizar esas tareas

  • Es la oportunidad de avanzar en la próxima revolución feminista: Inmujeres

* La legislación debe contemplar un enfoque de derechos humanos: Nashieli Ramírez

Diputadas, funcionarias, especialistas y representantes de la sociedad civil, al participar en las audiencias públicas hacia un Sistema Nacional de Cuidados, pugnaron por la no feminización de estas tareas, ya que corresponden a todas y todos.

Intervención de diputados

En el encuentro virtual, organizado por la Comisión de Puntos Constitucionales, su presidenta, diputada Aleida Alavez Ruiz (Morena), señaló la importancia de elevar a rango constitucional la responsabilidad del Estado como garante del sistema de cuidado.

“Llegó la hora en la Legislatura para transformar el pacto establecido en la Carta Magna y dar una visión distinta a las responsabilidades de las instituciones públicas. Es necesario considerar los costos que implican la incorporación de este derecho y su impacto presupuestal”, añadió.

El diputado Iván Arturo Pérez Negrón Ruiz (Encuentro Social) consideró indispensable atender de manera integral el Sistema Nacional de Cuidado, pues no puede haber política pública que no parta de los ejes fundamentales como la justicia, el derecho, el bienestar y el económico.

Por Morena, la diputada Sandra Paola González Castañeda destacó la urgencia de tener un sistema integral de cuidados adecuado debido a que han reinado las desigualdades. Resaltó las propuestas de las expertas sobre la importancia de publicar una ley general y armonizar aproximadamente 15 leyes al respecto.

De la misma fracción parlamentaria, el diputado Lucio Ernesto Palacios Cordero mencionó que es un tema de justicia social y se relaciona con la desigualdad de género. Es fundamental, dijo, repensar el nuevo modelo de cuidados y leerlo en derechos humanos, sin una visión asistencialista ni sexista.

Mujeres dedican más tiempo al cuidado que los hombres

Al participar en la Mesa 1 “Repensar las tareas de cuidados desde la igualdad y el bienestar social”, la presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), Nadine Gasman Zylbermann, afirmó que antes de la llegada de la pandemia se sabía que las mujeres dedican tres veces más de su tiempo al cuidado y trabajo doméstico que los hombres. Cuando llegan a la adolescencia ellas destinan hasta el 75 por ciento de su día.

Dijo que estamos en la oportunidad de avanzar en la próxima revolución feminista, pensando y reorganizando el tema de cuidados, porque a causa de esta pandemia nos hemos hecho más conscientes de la importancia de este asunto.

Sugirió un Sistema Nacional de Cuidados con una visión a futuro para que brinde servicios de calidad a la ciudadanía, lo que abonaría al crecimiento económico hasta en 43 por ciento del PIB, siempre y cuando se cierren las brechas entre hombres y mujeres en el mercado mexicano. “Estamos desperdiciando mucho talento”.

Para que este Sistema sea exitoso, continuó, debe desarrollar las capacidades y evitar el deterioro de las personas enfermas, pero alineado con principios de economía dando un valor a las actividades relacionadas con el cuidado. “La labor de cuidado se realiza sin remuneración, las mujeres han estado en la primera línea de respuesta durante esta pandemia, incluyendo su labor desde casa”.

Se requiere una perspectiva de género

En la Mesa 2 “Agenda de derechos humanos y política de cuidados”, la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, Nashieli Ramírez Hernández, reconoció que hay una crisis de cuidados y propuso adicionar medios de garantía para la satisfacción del derecho al cuidado; sustituir el concepto de persona adulta mayor por el de persona mayor, así como adicionar las facultades del Congreso de la Unión para establecer que podrán emitir la Ley General del Sistema Nacional de Cuidados.

Recordó que la Constitución Política de la Ciudad de México es el primer texto que incluye el derecho al cuidado y establece que habrá un sistema como parte de la política social. Añadió que persiste una carga en las mujeres con relación a las cuestiones de cuidado; por lo tanto, se requiere de una perspectiva de género.

Ramírez Hernández dijo que se debe acabar con la feminización del cuidado, para así ampliar la visión de que es responsabilidad de todas y todos. La legislación, agregó, requiere conciliar los derechos de quien recibe los cuidados y de quien los provee.

Llamó a consultar a los colectivos de derechos, personas con discapacidad, indígenas, afrodescendientes y garantizar la participación de niñas, niños y adolescentes, quienes son sujetos de cuidados pero también hay un gran número que son cuidadores. Planteó la modificación de al menos 15 leyes vinculadas.

Es evidente el desgaste de los cuidadores

Margarita Garfias, fundadora del colectivo #YoCuido, indicó que ante la emergencia de salud que se vive hay un desgaste evidente del cuidador, principal o primario, de alguna persona enferma o menores de edad, además de que el 48 por ciento presenta ya alguna enfermedad. “Después del encierro muchas personas se van a separar y se crearán más familias homoparentales. El COVID-19, llega con aumento de trabajo doméstico no remunerado”.

En México, 90 millones de personas realizan trabajo de cuidados

De la Red de Cuidados, Jana Vasil’eva, subrayó que en México, 90 millones de personas realizan trabajo de cuidados en el ámbito de los hogares y comunidades; no reciben remuneración ni acceso a los derechos sociales básicos, y del total de las horas que se dedican en el país a estas labores, 75 por ciento son realizadas por mujeres, niñas y adolescentes.

Urge incorporar el derecho a cuidar y ser cuidado

La presidenta fundadora de INCIDE Social AC, Clara Jusidman Rapoport, señaló que es urgente incorporar en la Constitución el derecho a cuidar y ser cuidado, y desarrollar un sistema nacional que garantice oportunidades de cuidados iguales y diversos, así como la retribución a familiares cercanos que hagan esta función. “La pandemia recordó que sobre las mujeres recaen las mayores responsabilidades del cuidado”.

Sistema de Cuidado no debe sustentarse en el asistencialismo

Pilar Alberti Manzanares, en representación de “Las Constituyentes CDMX, Feministas” consideró que la iniciativa de elevar a rango Constitucional el derecho al cuidado digno y al tiempo propio, es elemento fundamental que debe formar parte del Sistema Nacional de Cuidados para dar respuesta a los retos de un mundo globalizado que tendrá, en 2030, 100 millones de personas mayores, 100 millones de niñas y niños entre 6 y 14 años, así como millones de enfermos que necesitarán atención.

Las mujeres niegan el cansancio que causa cuidar a un familiar

De la Universidad Autónoma de Nuevo León, Sagrario Gray Villegas habló sobre la falta de reconocimiento a las mujeres por este tipo de asistencia. “La mayoría de las mujeres no reconoce que tienen cansancio por el trabajo que realizan”. Agregó que dadas las tendencias demográficas y económicas es necesario cuestionar cuál va a ser la capacidad de las familias para seguir sosteniendo esta labor de cuidados.

Debe haber responsabilidad familiar y generacional

Durante la Mesa 3 “Economía del cuidado, experiencias locales y su desarrollo en la perspectiva internacional”, María Edith Pacheco, investigadora de El Colegio de México, consideró que es de importancia que haya responsabilidad familiar, distribuir el cuidado entre hombres y mujeres de las distintas generaciones y que sea transversalizado con otras políticas públicas, como la educación y la salud. “Hay necesidad de remuneración mediante programas de transferencias y cuestiones fiscales”, comentó.

Salvar la economía puede obstruir este tema

Ailynn Torres Santana, de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) de Ecuador, pidió tomar en cuenta que esta crisis y su salida podrían obstruir el tema de cuidados frente a la necesidad de proteger la economía, por lo que se requiere de un pulso político firme, a fin de no desatender este debate sobre los sistemas integrales de cuidado.

Asistir a los demás es parte de la vida

Isabel Pérez de Sierra, colaboradora de FLACSO-Uruguay, puntualizó que puede haber una política en términos de cambio cultural, así como en normativas que hagan ver que el cuidado es parte de la vida, y establecer una remuneración específica para este trabajo, el cual ha sido desvalorizado y colocado en la informalidad. Destacó que un estudio indica que una de cada cuatro alumnas dejaba estudiar por dedicarse al cuidado.

Crear un mapa federal de cuidados

De Argentina, la doctora Cecilia Fraga propuso crear un mapa federal de cuidados que reconozca sus diversas formas, además de emprender una política pública que optimice la asignación de recursos, disminuya brechas de género, reproduzca la división sexual del trabajo y prohíba que únicamente sean las mujeres quienes cuiden a enfermos y a personas de la tercera edad.