Redacción.
23 julio 2020/Aci Prensa.- Mons. Ramón Castro Castro, Obispo de Cuernavaca, en el estado mexicano de Morelos, celebró recientemente Misa en una autocine, en medio de estrictas medidas de seguridad para prevenir el contagio de coronavirus COVID-19.
La celebración eucarística se realizó el domingo 19 de julio a las 8:00 a.m. (hora local), a pedido de los fieles y del párroco de la parroquia La Resurrección del Señor y Santa María de Guadalupe, en el barrio de Gualupita.
En diálogo con ACI Prensa, Mons. Castro Castro destacó que “después de varios meses de confinamiento, después de casi cinco meses sin celebrar para el pueblo, se presentó una oportunidad que tuve que discernir delante de Dios, porque la novedad, sobre todo en la liturgia, nos debe hacer siempre pensar para ir con pies de plomo”.
“Los laicos junto con un párroco me ofrecieron la oportunidad de celebrar la Eucaristía en un autocine”, recordó, y precisó que si bien no es la primera ocasión en que algo así se realiza en México “sí es la primera vez en nuestra diócesis”.
“Después de orar, después de reflexionar y consultar, acepté”, señaló.
El Prelado mexicano reconoció que si bien asistió a la celebración “con cierto temor”, descubrió “que era una experiencia muy buena”.
“Las personas que participaron realmente necesitaban, sentían, el deseo de estar en una celebración eucarística y de recibir no espiritualmente sino sacramentalmente a Jesús”, señaló.
“Lo vi en sus rostros, lo noté en su devoción, lo noté en la disposición”, añadió.
El Obispo de Cuernavaca destacó que para la celebración de la Misa siguieron “de la mejor manera y el más estricto” protocolo de desinfección alentado por las autoridades de salud.
“Todo se llevó a cabo con una devoción y con una fe que me dejó sumamente agradecido con Dios de haber aceptado esta sugerencia y de ver la moción del Espíritu”, dijo.
Mons. Castro Castro señaló que “yo creo y estoy convencido que ha sido una moción del Espíritu Santo, para que vayamos al encuentro con la seguridad necesaria que implican estos tiempos en la celebración de la Eucaristía”.
“Lo agradezco a Dios y espero con su gracia y bendición continuar con ello”, señaló.
Desde el 23 de marzo la celebración de la Misa se realiza de forma privada y sin fieles en la Diócesis de Cuernavaca, como una medida de prevención de contagios de COVID-19. Se espera que para los primeros días de agosto se pueda retomar el culto público.
