/Por Ana Quereda /
Madrid. 18 oct. 22. AmecoPress.- La Biblioteca Nacional de España (BNE) junto a la Federación Española de Mujeres Directivas, Ejecutivas, Profesionales y Empresarias (FEDEPE) y la Asociación Clásicas y Modernas llevan organizando esta iniciativa desde el año 2016. Durante este día se celebran actividades y talleres para reconocer el trabajo y las obras de las escritoras, y que su legado sea válido y reconocido. También cuentan con el apoyo de la Secretaría de Estado de Cultura, del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte e intentan coincidir que el día marcado sea el lunes más cercano al 15 de octubre debido a la festividad de Santa Teresa de Jesús, la patrona de los escritores españoles.
Este evento está lleno de actividades y talleres, donde destacan la lectura de fragmentos representativos de las obras de algunas escritoras y la Editatona del Día de las Escritoras, en colaboración con Wikimedia España. Esta última es una jornada que se celebrará el 18 de octubre y que consiste en la edición de Wikipedia para ofrecerle a esta enciclopedia online una mejor perspectiva de género y visibilizar el legado de las escritoras hispanas e hispanoamericanas a través de la edición, la creación y la mejora de artículos.
En esta edición el tema es “Antes, durante y después de las guerras” que, como su nombre indica, tratará sobre una realidad tan compleja como lo es la guerra desde el punto de vista de las mujeres. Por ello se han seleccionado unos textos basados en testimonios de guerra y posguerra, más allá de nuestro país, para entender el conflicto bélico y la presencia de las mujeres en él como una realidad en todo el mundo. Las lecturas de los textos escogidos girarán en torno a este tema.
Para cada edición se elige una comisaria quién es la encargada de seleccionar el tema alrededor del cual se va a realizar la lectura de textos, que serán leídos por personas reconocidas con gran prestigio social y cultural. Este año, la comisaria es la escritora Carmen Domingo, quién ha realizado una selección de textos que contienen fragmentos en catalán, gallego, euskera y muchos de los distintos acentos del castellano de España y de Latinoamérica, escrito por mujeres que forman parte de la cultura de esta lengua pero que desgraciadamente no son conocidas más allá de sus respectivos países.
Carmen Domingo explica cómo fue el proceso de esa elección:
“Es cierto que en España tenemos todavía la sombra de la Guerra Civil pero no quería ceñirme a un solo conflicto ni a un solo país, porque el Día de las Escritoras quiere hablar en muchos de los acentos del español, y en todos los países de habla hispana las mujeres han mostrado el dolor, la tristeza, la rabia, la vergüenza o la indignación frente a las guerras. Me dispuse a localizar mujeres que, de un modo u otro, reflejaron las ‘guerras’ en sus países de origen, para tratar de dar en este día una representación amplia y merecida de lo sucedido. Así, junto a plumas de nuestra literatura peninsular como Concepción Arenal, Emilia Pardo Bazán, Carmen Martín Gaite o Almudena Grandes, nos acompañarán la hondureña Berta Cáceres, la mexicana Rosario Castellano, la guatemalteca Alaíde Foppa, la chilena Ángeles Jeria o la argentina María Eugenia Walsh, entre otras”.
La Biblioteca Nacional de España ha invitado a que formen parte de esta jornada todas las bibliotecas del Consejo de Cooperación Bibliotecaria, a la red de centros culturales de la AECID, a la red de bibliotecas del Ayuntamiento y de la Comunidad de Madrid, a las bibliotecas que forman parte de ABINIA (Asociación de Bibliotecas Nacionales Iberoamericanas) y a todas las instituciones que deseen formar parte de este día y unirse a la celebración.
Ana Bujaldón, presidenta de FEDEPE, tiene muy presente la realidad de este día:
“En estas siete ediciones hemos tenido oportunidad no solo de descubrir y disfrutar de la literatura de tantas mujeres escritoras olvidadas, sino de tender puentes entre mujeres de distintos ámbitos. Hemos conectado el mundo de la empresa con la novela, la poesía, el ensayo… Lo que importa es escuchar lo que tienen que decir las mujeres desde todos los ámbitos y darle valor”.
Y Fátima Anllo, presidenta de Clásicas y Modernas, también es consciente de lo que han supuesto estas siete ediciones que ya llevan celebrándose, ya que “han proporcionado intensidad y volumen a la voz de las mujeres que circulaban de forma dispersa, cuando no subterránea”.
Desgraciadamente esta celebración no es internacional, aunque sí centrada en los países hispanohablantes, pero a través de distintas actividades, la Biblioteca Nacional busca que se unan a este día el mayor número de personas posibles para sacar a las escritoras de la discriminación y del olvido y poder resaltar su trabajo en la literatura.
¿Puedes ser olvidada si nunca has sido reconocida?
Casi desde el inicio de la escritura a las mujeres se les ha privado, no solo de su aprendizaje, pero también de su realización. Aquellas que a pesar de los inconvenientes pudieron escribir siempre tuvo que ser bajo seudónimos.
Fue mayoritariamente en el siglo XIX cuando muchas escritoras empezaron a firmar con seudónimos masculinos y a esconderse detrás de ellos, siendo conscientes de la desigualdad que sufrían en la sociedad y que era la única forma en la que sus obras no fuesen infravaloradas.
Las escritoras firmaban bajo seudónimos masculinos o, directamente, con el nombre de su marido, el cuál se terminaba llevando todo el mérito, para poder publicar, para que su obra fuese leída, reconocida y que gozase de respeto, admiración y peso cultural. De esta manera los hombres las leían y las escuchaban, aunque fuese desde una sombra.
Muchas de ellas eran mujeres sobresalientes y la sociedad no les permitía ser más que los hombres, necesitaba callarlas y apartarlas a un segundo plano. La lista de escritoras que tuvieron que existir con un seudónimo masculino para poder publicar es muy extensa, algunas de ellas fueron Mary Anne Evans (George Eliot), Caterina Albert i Paradís (Víctor Catalá), Cecilia Böhl de Faber (Fernán Caballero), las hermanas Brönte (Curren, Ellis y Acton Bell), Matilde Cherner (Rafael Luna), Amantine Aurore Lupin (George Sand).
A medida que la sociedad fue avanzando, fue más sencillo poder empezar a firmar bajo un nombre de mujer si escribías novelas de costumbre o poesía, pero para libros de historia o de ciencia seguía siendo inadmisible. Por ejemplo, las hermanas Brönte pudieron llegar a deshacerse de sus seudónimos, pero Mary Anne Evans tuvo que ser George Eliot toda su vida.
Pero en los últimos años se ha estado luchando de diversas maneras para poder visibilizar y reconocer el trabajo de las escritoras tanto aquellas que la sociedad les impidió luchar, como las actuales o emergentes.
Gracias a internet y a las redes sociales se está consiguiendo una concienciación masiva. Grandes plataformas se dedican solo a difundir los trabajos de escritura femenina, en las editoriales la gran mayoría de sus más vendidos son obras escritas por mujeres y las escritoras están consiguiendo movimientos y movilizaciones de miles de personas seguidores de sus obras. El fenómeno arrasa, sobre todo, en la literatura juvenil, lo que nos deja ver que el futuro puede llegar a ser muy prometedor.
Este movimiento social actual por las escritoras es tan potente que incluso se han visto casos donde la historia ha “intercambiado los papeles”. Durante los Premios Planeta 2021 pudimos ver cómo la ganadora Carmen Mola no era más que un seudónimo femenino para los que eran en realidad tres escritores y guionistas con renombre: Antonio Mercero, Agustín Martínez y Jorge Díaz.
Carmen Mola está consiguiendo ser el seudónimo más famoso de los últimos años debido a la cantidad de ejemplares vendidos, los premios y la polémica de tres autores apropiándose de un nombre femenino. Ellos afirman que “no se han escondido tres detrás de una mujer, sino detrás de un hombre”, pero no ha dejado de ser un hecho que muchas personas han catalogado como un retroceso en nuestra sociedad e incluso como burla, ya que no entienden cómo tres hombres con una carrera exitosa han sentido la necesidad de elegir un seudónimo de una mujer cuando históricamente las mujeres han tenido que esconderse bajo nombres masculinos para poder publicar. Por redes sociales fueron muy denunciados públicamente de querer aprovecharse del éxito actual y la cantidad de ejemplares vendidos con los que cuentan las escritoras.
Una de las polémicas que más incendió internet debido a Carmen Mola, fue con la librería “Mujeres y compañía”, una tienda madrileña que retiró sus ejemplares de Carmen Mola tras conocer su identidad, ya que la línea de su negocio es la especialización en narrativa femenina, feminismo y cuentos infantiles no sexistas. Su comunicado en twitter fue claro y directo: “nuestra aportación al hashtag Carmen Mola, pero Mola más que los señores no lo ocupen todo”, junto a un vídeo en el que amontonaban en cajas sus libros para devolverlos a la editorial Penguin Random House.
Actualmente, Carmen Mola (tres autores, tres hombres, tres guionistas de cine), sigue gozando de un gran éxito con sus publicaciones y parece que han sabido aprovecharse de esa polémica de la mejor manera posible, ya que siguen entrando en listas de éxito y apenas la gente recuerda quién está detrás. Su última novela publicada se llama “Las madres” y capta la atención del público que el tema que aborda sea la realidad sobre los vientres de alquiler y la violencia sobre la mujer.
A pesar de todo el avance que se puede notar con las escritoras en el mundo editorial y en la sociedad, aún queda mucho camino por avanzar. En muchas ocasiones se les sigue denigrando su trabajo calificándolas como “autoras juveniles” o “autoras de romance”, géneros que quieren dejar ver como que no son “literatura de verdad”, en premios literarios sigue siendo extraño que haya un número superior de mujeres que de hombres, y todavía la historia la siguen marcando los escritores.
Pero la concienciación de la sociedad es muy real y la juventud está haciendo mucho ruido. Los números de venta hablan por sí solos y el cariño de las personas lectoras está en un lado claramente femenino.
Fotos: archivo AmecoPress
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Pie de foto 2: Biblioteca del Libro y la Lectura – Día de las Escritoras 2018
Pie de foto 3: Joana Marcús, autora actual juvenil en una de sus firmas
Pie de foto 4: Carmen Mola recogiendo el Premio Planeta 2021. Cedida por Planeta
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Cultura – Cultura y arte – Escritoras. 13 oct. 22. AmecoPress.