ARANCELES DE U.S.A. A LA INDUSTRIA AZUCARERA GOLPEARÍAN VERACRUZ

  • CAFÉ DE MAÑANA .
    / Por José Luis Enríquez Ambell /

 

La agroindustria azucarera de Veracruz está en momentos de alta incertidumbre ante la posibilidad de nuevos aranceles impuestos por los Estados Unidos y la importación de jarabes de maíz ricos en fructosa.

El riesgo está abierto y ojalá que autoridades del gobierno de la república tengan la bondad de acercarse y recibir la orientación de quienes producen la caña de azúcar y la transforman en el endulzante, así como de industriales, como dueños de las fábricas, para asesorarse previa y durante las negociaciones con funcionarios de los EE. UU.

Incluso, servidores públicos del gobierno de Veracruz y dirigentes cañeros, azucareros e industriales en el estado —contamos con 18 ingenios de los 49 que siembran caña y producen azúcar en el país— son referencia nacional e internacional para sentarse en las mesas de negociación, pues nuestra entidad representa el 40 % de la gramínea.

Hace unos días, don Manuel Enríquez Poy, director operativo de la ATAM (Asociación de Técnicos Azucareros de México), advirtió que, aunque no hay aún medidas arancelarias concretas, el riesgo sigue latente y data desde 2015.

Incluso, la presidenta de la Cámara Nacional de las Industrias Azucarera y Alcoholera (CNIAA), Claudia Fernández, ha planteado la necesidad de reunirse en Estados Unidos en los próximos meses para renegociar el acuerdo que evite una cuota compensatoria de 85 % al azúcar nacional.

Cabe decir que, cada cinco años, la industria mexicana renueva con la Unión Americana un acuerdo de suspensión para exportar el endulzante, al fijar el precio y porcentaje de azúcar refinada y cruda a enviar en un ciclo. Esto con el objetivo de evitar el supuesto “dumping”, es decir, la venta de un producto por debajo del precio real de mercado.

Y es que, en el comercio internacional, el dumping refiere a la práctica de una empresa de vender sus productos en un mercado extranjero a un precio inferior al de su mercado interno, o incluso por debajo del costo de producción. Esta práctica es considerada desleal y puede perjudicar a las empresas locales que compiten con esos productos importados a precios más bajos, más en estos momentos en que la industria estadounidense se siente empoderada para sacar ventajas, dado que el presidente de EE. UU., Donald Trump, pretende usar convenios “como más le conviene”.

De ahí la importancia de que los funcionarios de México —gobierno federal y estatal— sostengan reuniones con los industriales del azúcar, los productores cañeros y obreros azucareros.

Ese cruce de información podría aleccionar a las autoridades mexicanas que se sienten con sus similares estadounidenses, en busca de una negociación más fácil en términos justos.

PARA POSTRE

En la idea de imponer aranceles por parte de EE. UU. a la agroindustria azucarera mexicana, no estaría mal que nuestros legisladores federales, así como los locales en estados como Veracruz, sean parte de la política comercial que intervenga en las posibles decisiones y modificaciones que requieren de intervención legislativa.

Y es que esta tensión internacional comercial golpea ante la importación creciente de los jarabes de maíz, que han desplazado más en varios millones de toneladas equivalentes de la azúcar nacional.

UN CAFÉ LECHERO LIGHT

No hacer nada, pudiéndolo hacer por parte de nuestras autoridades de gobierno y legislativas, de la mano del sector azucarero en su conjunto, estaría colocando a la caña de azúcar en el mercado internacional con precios bastante desfavorables, y golpearía la rentabilidad de ingenios, productores y obreros.

Y es que, de por sí, hay suficientes problemas, como el descenso en los volúmenes de cosecha y la paridad del peso frente al dólar, que encarece las exportaciones.

UN CAFÉ CON PILONCILLO

El campo cañero y azucarero de Veracruz es fuente de empleo industrial que el gobierno de Rocío Nahle, se entiende que lo riega y cultiva para beneficio de la población, a través de la Sedarpa y Sedecop, entre otras dependencias. Cuidando a este sector de la economía se protege alrededor del 50 % de municipios que viven del mismo y cubren a casi 1.5 millones de habitantes directa e indirectamente o sea; el 20 % de habitantes en nuestra entidad.

¡ES CUANTO!

enriquezambell @gmail.com
enamjl62 @gmail.com