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/ Por Jorgina Gaxiola ./
Margarita Ceceña, de 30 años, en Morelos; falleció después de estar 23 días en terapia intensiva. La rociaron de gasolina, le prendieron fuego y la quemaron viva sus propios familiares. Había presentado denuncias ante la Fiscalía, la ignoraron.
Luz Raquel Padilla, de 35 años, en Jalisco; cinco personas la rociaron con combustible y le prendieron fuego el pasado 16 de julio, murió la semana pasada. También había denunciado amenazas de muerte ante el Ministerio Público pero no le dieron protección. Parece que el presunto agresor es un vecino con quien tenía diferencias. Además denunció a su ex pareja por maltrato familiar y la alcaldía de Zapopan le negó el sistema de resguardo contra la violencia familiar. A pesar de las denuncias que presentó, ni el MP ni la alcaldía hicieron nada por prevenir su asesinato.
El caso de Debanhi Escobar, de 18 años en Nuevo León; murió por asfixia por sofocación, no por asfixia por sumersión como habían dicho las autoridades de la Fiscalía General de Justicia de Nuevo León. Tuvieron que hacer una segunda necropsia para descartar el peritaje inicial. La incompetencia de las autoridades.
De acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, los datos de presuntos feminicidios han aumentado ocho años consecutivos: En 2015 asesinaron a 412 mujeres, así sucesivamente: 2016,(607), 2017 (742), 2018 (898), 2019 (946), 2020 (949), 2021 (978) y 2022 (385, hasta mayo). https://drive.google.com/file/d/1ZYIIcpOfrINFGxGWJUjUEqeMhevqrKn4/view
El Código Penal Federal (art.325) establece que comete el delito de feminicidio quien prive de la vida a una mujer por razones de género. Las circunstancias del tipo penal son las siguientes: 1) que la víctima presente signos de violencia sexual; 2) que le hayan infligido lesiones o mutilaciones infamantes o degradantes; 3) que existan antecedentes o datos de cualquier tipo de violencia en el ámbito familiar, laboral o escolar del sujeto activo; 4) que haya existido una relación sentimental, afectiva o de confianza con el sujeto activo; 5) datos que establezcan que hubo amenazas o acoso del sujeto activo vs la víctima; 6) que la víctima haya estado incomunicada por cualquier periodo de tiempo; 7) que el cuerpo haya sido expuesto o exhibido.
En 2020, el fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero, propuso eliminar el delito de feminicidio para que fuera homicidio con agravantes. Argumentó que es difícil comprobarlo, que los elementos del delito son complicados. El Observatorio Ciudadano Nacional de Feminicidio respondió que los elementos no son complicados, sino que se debe llevar a cabo una investigación con la debida diligencia. La Comisión Nacional de Derechos Humanos también contestó en su momento: cambiar el delito invisibilizar el componente de odio contra las mujeres, esencial para distinguir el motivo de los asesinatos. Estimado lector: ¿cómo resolver el asesinato de mujeres sin la voluntad de las autoridades?
