- Cinco muxes del Istmo de Tehuantepec narran, desde un limbo simbólico, historias de vida marcadas por la identidad, la violencia y la ternuraHortensia Moreno
● Una propuesta de cabaret surgida de un laboratorio escénico comunitario, escrita colectivamente y construida con humor, memoria y profunda honestidad escénica.
29.06.2025. Ciudad de México.- En el marco de las celebraciones por el Día Internacional del Orgullo LGBTIQ+, la Secretaría de Cultura del Gobierno de México presentó el viernes 27 de junio de 2025, en el Centro Cultural Helénico, Benda’ Muxe’ / Mi hermana Muxe, una pieza de cabaret surgida de un proceso de creación colectiva con integrantes de la comunidad muxe del Istmo de Tehuantepec, Oaxaca.
Con dramaturgia y dirección de Cess Enríquez, codirección de Luis Montalvo y las actuaciones de Luis Montalvo, Eli Mijangos, Violete Núñez, Isabela Urbierta y Naomi Riva, la puesta da voz a cinco muxes que, desde un espacio entre la vida y la muerte, reconstruyen sus historias atravesadas por la identidad, la violencia, el deseo, la memoria y el humor.
La propuesta pone al descubierto múltiples formas de discriminación, violencia, exclusión y asesinatos a la comunidad muxe. En la cultura zapoteca del Istmo, el término muxe designa a personas que no se identifican con los géneros binarios masculino o femenino. No son hombres homosexuales ni mujeres trans: son muxes. En Benda’ Muxe’ / Mi hermana Muxe, el teatro es un vehículo de emancipación colectiva, pero también una forma de denuncia que conecta con públicos diversos desde la risa, la emoción y la valentía.
Resultado de un laboratorio de teatro comunitario desarrollado entre 2023 y 2024 por Cess Enríquez y Luis Montalvo en Santo Domingo Tehuantepec, Oaxaca, con la colaboración de la activista muxhe Joselin Sosa, la propuesta reunió a seis participantes, quienes durante cinco meses realizaron ejercicios de improvisación, escritura, creación escénica, exploración corporal y diseño de vestuario y escenografía.
“La obra nació hace dos años como parte de una beca de creación escénica. Durante cinco meses hicimos un trabajo de juego, escucha y escritura compartida. Muchas de las escenas, objetos y personajes fueron ideados colectivamente. La historia mezcla experiencias personales, anécdotas de otras muxes, relatos de abuelas, amigas, vecinas. Eso la hace poderosa”, declaró Luis Montalvo, codirector.
A su vez, Violete Núñez, quien interpreta a Trinidad, comentó: “Fue un reto enorme. Algunas de nosotras nunca habíamos actuado, nos costaba trabajo hablar en público. Trabajábamos de día y ensayábamos por las noches. Pero también fue una experiencia hermosa: la obra la hicimos todas. Cada quien aportó ideas, historias, gestos. Así se volvió nuestra”, menciona.
Una historia colectiva en el limbo de las personas muxes
La puesta en escena transcurre en un limbo festivo y fantasmagórico, construido con elementos simbólicos del Istmo como petates, canastas, barro y trajes típicos. Ahí, cinco muxes esperan el arribo de una nueva alma, con la esperanza de que su llegada permita a una de ellas trascender al “cielo de caguamas y angelitos”.
A través de este dispositivo escénico, las protagonistas cuentan sus historias de muerte: la telegrafista que debía vestirse de hombre para trabajar; la novia que perdió a su amado; la tía cuya iglesia fue sumergida por una presa; la que se mira al espejo en busca de su reflejo perdido. Cada relato mezcla humor y crudeza, cotidianidad y tragedia, realidad y fantasía.
“Contar algunas de esas historias fue difícil. Hay momentos muy fuertes, de violencia, de tristeza. Pero el cabaret nos ayudó a aligerar, a reírnos de nosotras mismas, a burlarnos del dolor, a liberarnos”, declaró la actriz Naomi Riva.
Cabaret como resistencia: risa, identidad y catarsis
El uso del cabaret como lenguaje escénico es clave en Benda’ Muxe’. Conocido por su tono lúdico, directo, irreverente y festivo, el cabaret permite crear una comunicación directa con el público y romper la cuarta pared.
La dirección conjunta de Cess Enríquez –reconocida por propuestas como La Prietty Guoman– y Luis Montalvo destaca por su capacidad de articular el humor con la denuncia social, al tiempo que resignifica los elementos culturales del Istmo dentro de un lenguaje escénico contemporáneo y comprometido.
Desde su estreno, la puesta en escena se ha presentado en distintos espacios y foros del país, como el Festival Internacional de Cabaret, Teatro El Milagro, Ciudad Juárez, Tijuana, Monterrey, y ahora en la Ciudad de México. En cada función, las actrices –ninguna con formación actoral profesional– dan vida al escenario con una verdad inquietante y conmovedora.
Fuente: Conaculta
Foto: Durante el ciclo “Junio, mes de la diversidad” en el CEPE, la escritora ofreció una charla. Foto: archivo Gaceta UNAM.