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15.01.2024 Guatemala.- Luego de un domingo de dificultades que conllevó horas de retraso Bernardo Arévalo por fin rindió protesta como Presidente Constitucional de Guatemala, superando la resistencia judicial contra su investidura.
Siendo las 23:59 horas del pasado domingo 14 de enero, se reanudó la sesión solemne del Congreso de la República, pero en el escenario de la Gran Sala Efraín Recinos, del Centro Cultural Miguel Ángel Asturias, en donde se le dio posesión a Bernardo Arévalo como presidente, así como a Karin Herrera, como vicepresidenta.
Jefes de Estado, cancilleres, funcionarios de alto nivel y el Secretario General de la Organización de los Estados Americanos (@OEA_oficial) que permanecieron por mas de 12 horas de retraso de la ceremonia de investidura de Bernardo Arévalo , redactaron el 14 de enero la “Declaración en apoyo al Presidente Bernardo Arévalo y a la democracia en #Guatemala”, en la que hicieron un “llamado al Congreso de la República a cumplir con su mandato constitucional de entregar el poder como exige la Constitución en el día de hoy al presidente electo Bernardo Arévalo y a la vicepresidenta electa Karin Herrera.”
Finalmente a las 00:04 horas de este lunes 15 de enero, entró a la Gran Sala el presidente, Bernardo Arévalo, acompañado de su esposa, Lucrecia Peinado.
Siendo las 23:59 horas del pasado domingo 14 de enero, se reanudó la sesión solemne del Congreso de la República, pero en el escenario de la Gran Sala Efraín Recinos, del Centro Cultural Miguel Ángel Asturias, en donde se le dio posesión a Bernardo Arévalo como presidente, así como a Karin Herrera, como vicepresidenta. Esto en medio de una lucha constante por defender la democracia del país.
Con más de 12 horas de atraso en el Palacio Legislativo, inició el acto protocolario con el ingreso de los dignatarios invitados al acto; además, dándole la bienvenida a los invitados extranjeros que decidieron quedarse al acto.
La primera en ingresar a acto fue la vicepresidenta, Karin Herrara, quien iba acompañada de sus hijos. En medio de gritos y aplausos, y con el apoyo de las personas asistentes al Teatro Nacional.
Posteriormente, a las 00:04 horas de este lunes 15 de enero, entró a la Gran Sala el presidente, Bernardo Arévalo, acompañado de su esposa, Lucrecia Peinado.
La jornada, en la cual el binomio presidencial prestó juramento, estuvo marcada por manifestaciones por los atrasos. Además, pasada la primera ronda de las elecciones generales, del 25 de junio de 2023, inició una lucha en el sistema de justicia tanto para mantenerse en la contienda, así como para evitar que se restara validez a los resultados de los comicios.
Continuando con el arribo de los funcionarios, el ahora exvicepresidente saliente, Guillermo Castillo, fue a entregar el cargo.
Quien no asistió fue Alejandro Giammattei, presidente saliente, quien envió una nota al Congreso de la República, en la cual indicó que entregaba las insignias que lo acreditaban como jefe de Estado.
Pese a que varios miembros del cuerpo diplomático se retiraban por el atraso en el Congreso, y por sus apretadas agendas, el Teatro Nacional se veía con amplia afluencia. Todos esperaban ver a Bernardo Arévalo con la banda presidencial.
La ceremonia continuó con el ingreso, el Pabellón Nacional y la entonación del Himno Nacional de Guatemala, en la cual se sumaron las voces de los invitados al evento.
A las 00:15 del lunes fue leído el oficio que mandó Giammattei al Legislativo, con el cual hizo entrega de las insignias que posteriormente tenían que ser colocadas a Arévalo, quien se mostraba feliz, al llegar a la toma de posesión, bajo un intenso ataque que duró varios meses, evitando un golpe de Estado disfrazado.
Minutos más tarde, el presidente del Congreso, Samuel Pérez, sacó la Constitución Política de la República de Guatemala para solicitarle a mandatario su juramento como presidente del país. «Sí, juro», fueron las palabras de Arévalo, elegido para dirigir al país en el periodo 2024 – 2028.
Posteriormente, Pérez colocó la banda presidencial a jefe del Organismo Ejecutivo, en compañía de Peinado, su esposa.
Con la banda presidencial en el hombro, los diputados le solicitaron que tomara su lugar como presidente de Guatemala.
Luego, los legisladores le dieron el cargo a la vicepresidenta Karin Herrera, quien iba acompañada de sus hijos. Frente a ellos, juró fidelidad a la Constitución y demás leyes de la nación.
De igual manera, se pidió a Herrera ocupar su lugar como vicepresidenta de la República para el período 2024-2028.
Tanto Arévalo como Herrera fueron llamados a firmar en el Libro de Oro del Congreso, como símbolo de sus respectivos compromisos con el pueblo de Guatemala. Posteriormente, lo hicieron los integrantes de la Junta Directiva del Organismo Legislativo para el período 2024-2025.
OFRECE COMBATIR CON LA CORRUPCIÓN
En su primer discurso como presidente, Arévalo, ofreció combatir contra la corrupción que ha operado en las distintas instituciones públicas.
La Fiscalía intentó anular los resultados electorales desde julio, acusando a Arévalo de corrupción.
Se recuerda que pasada la primera ronda de las elecciones generales, del 25 de junio de 2023, inició una lucha en el sistema de justicia tanto para mantenerse en la contienda, así como para evitar que se restara validez a los resultados de los comicios.
El político progresista denunció estas acciones como un intento de golpe de Estado.
A pesar de las amenazas, Arévalo contó con el respaldo internacional, incluyendo EE.UU., la Unión Europea y la OEA.
La Corte de Constitucionalidad garantizó la transición, pero el Congreso, tras la suspensión de su partido, puede limitar su margen de maniobra.
Arévalo asegura querer luchar contra la corrupción y reconstruir las instituciones democráticas.
