Bienal en Guanajuato.

*Hechos y Susurros.

/Dolores Colin/

En el complejo tejido de nuestra sociedad, la conexión entre cultura y comunidad presenta desafíos constantes. En este contexto, la 15ª Bienal FEMSA, que coordina desde la dirección ejecutiva Laura Pacheco, emerge como una plataforma que no solo exhibe arte en Guanajuato, sino que actúa como un catalizador de cambio social. Su enfoque en hacer que el arte sea accesible a diversas comunidades subraya la importancia de una cultura inclusiva y equitativa.

El proyecto impulsado por Fundación FEMSA, encabezada por Lorena Guillé-Laris, va más allá de ser una simple exposición. A través de iniciativas como “Relieves” y “Desplazamientos”, la bienal fomenta el empoderamiento comunitario mediante el arte y la cultura. Estos programas crean espacios donde el diálogo y la reflexión permiten a las personas reconectar con su patrimonio cultural, abordando cuestiones de identidad y realidad social.

El impacto del proyecto, que se podrá visitar hasta finales de agosto, no se limita a la apreciación estética. Los artistas participantes, al explorar temas como la corporalidad, la identidad y el territorio, no solo representan la diversidad de perspectivas y experiencias, sino que también interactúan con el entorno local. Este enfoque reconoce y valora las historias y conocimientos que suelen quedar al margen en la narrativa cultural dominante.

La Bienal FEMSA demuestra que el arte puede servir como una herramienta poderosa para el cambio social. Al ofrecer un modelo de cómo las plataformas artísticas pueden hacer una diferencia tangible, nos recuerda que la cultura es un derecho fundamental, no un lujo. La accesibilidad a la cultura y el arte debe ser una prioridad en cualquier sociedad que aspire a la justicia y la equidad.

analizar los retos que ya se enfrentan ante el cambio climático, como plagas, sequía, producción y distribución. Confirmaron la necesidad de la aplicación de políticas públicas, transparentes, con base científica en beneficio de la seguridad alimentaria de los mexicanos. En México, el valor de la producción de cultivos agrícolas superó los 921 millones de pesos en 2023, pero sí se dejaron de utilizar los agroquímicos, según la FAO se perdería hasta 40% de la producción de alimentos.