De todos es sabido que los últimos años han sido muy complicados para el sector cafetalero veracruzano. La roya, la falta de interés de las autoridades, entre otros factores, han provocado que muchas de las fincas terminaran en fraccionamientos. Basta darse una vuelta por Coatepec y Xalapa para darse cuenta de eso.
La semana pasada, en el Congreso Local, se reformó la Ley para el Fomento, Desarrollo Sustentable, Producción, Distribución y Comercialización del Café Veracruzano, impulsada por la diputada panista Nora Jessica Lagunes Jáuregui. Entre los factores relevantes de la citada reforma está la conformación de un Consejo Consultivo tripartito y la reformulación del Instituto del Café Veracruzano, pero, además, la revisión de procesos, desde la producción hasta de promoción.
Asimismo, con estos cambios buscan fomentar la producción de pequeña escala por lo que ya varios municipios veracruzanos están trabajando con sus próximos alcaldes en sumarse a la competitividad cafetalera. Otro de los puntos primordiales es la creación de un Precio de Referencia del café en el Estado, que ha sido un añejo reclamo de los productores, por la depreciación que ha tenido el grano; el anhelo de que regresen esos años cuando el café valía y regiones como esta de Xalapa, Huatusco y Córdoba, el dinero corría gracias al aromático.
En la letra, se trata de una reforma de vanguardia que podría ayudar a cientos de productores veracruzanos. Lo más complicado ahora es hacerla realidad, romper intereses millonarios, destinar recursos para campañas de promoción del consumo del café veracruzana en otras latitudes y, de verdad, apoyar a aquel que ha tecnificado su finca, pero también al que junto con su familia, lo cultiva en las altas montañas. Si lo logran, será una ayuda que en años no se les ha dado a los cafeticultores. Que así sea.
@YamiriRodriguez