Carlo Acutis, el Primer Santo milenial

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05.09.2025 Con solo 15 años, Carlo Acutis dejó una huella imborrable en el mundo católico: combinó una profunda espiritualidad con su pasión por la tecnología, creó una web sobre milagros eucarísticos y vivió su fe con naturalidad, cercanía y compromiso.

En un hecho histórico para la Iglesia católica, la institución esta a solo días de inscribir oficialmente a Carlo Acutis en el Registro de los Santos, quien se convertirá en el primer milenial en ser canonizado, ceremonia que fue aplazada por coincidir en fechas posteriores al fallecimiento del papa Francisco.

Será el papa León XIV quien presida la solemnidad del joven beato fallecido a los 15 años en 2006 a causa de una leucemia fulminante.

¿Cuándo será canonizado Carlo Acutis?

La ceremonia se realizará este domingo 7 de septiembre, y será transmitida en vivo a través de Youtube por EWTN Español.

Durante la jornada también será canonizado Pier Giorgio Frassati (1901-1925), un joven italiano reconocido por ayudar a los pobres y enfermos, y oponerse al fascismo.

¿Quién fue Carlo Acutis?
Nacido en Londres en 1991, Carlo era hijo de padres italianos. La familia se trasladó a Milán cuando él tenía apenas tres años, por iniciativa del propio niño.

A pesar de que sus progenitores no eran practicantes, Carlo desarrolló desde pequeño una profunda fe. “Carlo era un chico de su tiempo, que ha vivido todo lo que viven los jóvenes ahora, pero que había abierto de par en par la puerta de su corazón a Dios y su vida ordinaria se convirtió en extraordinaria”, relató su madre, Antonia Salzano.

La vida espiritual de Carlo comenzó muy temprano: recibió la Primera Comunión a los 7 años, asistía a misa diariamente, rezaba el rosario, leía las Escrituras y realizaba adoraciones eucarísticas con regularidad.

Más allá de su vida religiosa, Carlo fue un adolescente con intereses comunes: le gustaban el deporte, los animales y la tecnología.

A los 11 años creó un sitio web en el que documentó milagros eucarísticos y apariciones marianas, y usó sus habilidades informáticas para conectar a unas 10.000 parroquias mediante redes digitales. Así, se ganó el apodo de “el influencer de Dios”.

Lamentablemente, en 2006 contrajo una leucemia fulminante que acabó con su vida en cuestión de semanas.

El diagnóstico fue devastador: sus padres pensaron inicialmente que se trataba de una gripe, pero la enfermedad avanzó rápidamente y murió en un hospital de Monza, Italia.