Controlador y abusivo, 2 características del macho.

*La catedrática de la Universidad Iberoamericana de León Guadalupe Fernández Aguilera aseguró que históricamente a las mujeres se les ha controlado desde dos aspectos fatales: la sexualidad y la violencia.

*Las mujeres deben identificar las actitudes de un macho.

/ Patricia Chagoya /

¿Cuál es el actuar de un hombre que es machista?, la respuesta muchas mujeres quisieran saberla antes de involucrarse con alguno y que su vida se convierta en una ‘pesadilla’. Sin embargo, en la vida diaria, las actitudes machistas son percibidas como un actuar normal, que se ha arraigado en la sociedad.

Según la catedrática de la Universidad Iberoamericana de León, Guadalupe Fernández Aguilera, un hombre que es machista puede identificarse con acciones derivadas del control que quiere ejercer sobre una mujer, a la que considera inferior a él.

“Un hombre machista lo que pretende es controlar, históricamente a las mujeres se les ha controlado, desde dos aspectos fatales: desde la sexualidad, otro es desde la violencia”, afirmó.

El control comienza, prohibiendo al sexo femenino hacer cosas que gusta realizar. Sea de índole privado o Público.

Por ejemplo: Cómo ejerce el poder, la manera en que trata los asuntos públicos. Su discurso, su narrativa, su manera de conducir el país. Todo es criticable por lo que estos seres tienen a darle órdenes desde su “autoridad”.

En el ámbito privado prohiben vestir de forma determinada, debido a que el macho lo puede considerar como algo provocador; a la que cela por distintas circunstancias que después explica que es por el amor que le tiene; a la mujer a la que limita de que hable ante ciertas personas o situaciones; a la que mantiene en la vida privada (en el hogar), por considerar que ese es el lugar que ocupa en la sociedad, sin permitir que se realice como profesional y depositándole la responsabilidad del cuidado de los hijos y/o de algún adulto mayor, y a la que va alejando de sus familiares, amigos o conocidos.

La ‘dominación’ de la mujer se lleva hasta tal grado que, a decir de la especialista, la fémina va perdiendo su independencia, que incluso tiene que pedir permiso a su pareja para poder tomar alguna decisión, además de esto, el alejamiento de sus relaciones interpersonales, la vuelve vulnerable de que continúe con esa relación “enfermiza”, por no considerarse capaz de poder seguir su vida sola.

Al día de hoy, considera Guadalupe, el machismo ha evolucionado hasta ser más ‘sutil’, pues ya no es aquella demostración de agresividad, de ese machismo burdo, que se hacía hace siglos, en épocas en las que incluso las mujeres eran desplazadas y a las que nos se les tomaba en cuenta para las decisiones, incluso a nivel social.

Con la tecnología, el machismo se ha “actualizado”, pues ahora los hombres de manera ‘educada’, se inmiscuyen en las objetos personales de sus parejas, como en los celulares, pues los revisan para saber con quién mensajean o hablan, así como en las cuentas de correo o de Facebook, pues ya hasta les piden que les den sus contraseñas, para estar al pendiente de lo que platican y con quién lo platican.

“En la actualidad, con todos los avances tecnológicos, los celulares, el uso de Internet podemos ver en los jóvenes y en las personas de mediana edad cómo ya hay un control”, mencionó.

Pues ahora, dijo, otorgar la contraseña al novio, se convierte en la “prueba de amor” contemporánea.

Este actuar del hombre, es justificado sistemáticamente por la mujer, que ante sus conocidos argumenta que es una situación normal de la relación.

El machismo, según lo define Fernández Aguilera, es: “considerar superior el género masculino, sobre el género femenino. Es la inferiorización de las mujeres de manera sistemática”.

Es por ello, que el hombre busca controlar a quien considera inferior, sea con violencia física, psicológica, económica o mediática.