Desalojan fiesta clandestina con más de 800 menores en CDMX.

*Hay jóvenes intoxicados.

* Protección Civil y Policía Auxiliar intervinieron tras reportes vecinales; se evitó una posible tragedia.* La fiesta se desarrollaba con sobrecupos en un salón ubicado en Magnolia 174.

16.05.2025 Ciudad de México.- Una fiesta clandestina con más de 800 jóvenes, en su mayoría menores de edad, fue desalojada la tarde del viernes en un salón de eventos en la colonia Morelos, gracias a la intervención inmediata de las áreas de Seguridad Ciudadana, Protección Civil y Gobierno de la Alcaldía Cuauhtémoc.

La operación se activó tras múltiples llamadas vecinales. Al llegar al lugar, ubicado en Magnolia 174, personal de la Dirección General de Gobierno, y de Protección Civil encontró a al menos cinco jóvenes en estado de intoxicación, algunos de ellos inconscientes en la vía pública. Fueron atendidos de inmediato por paramédicos de Cuauhtémoc y del ERUM.

Policía Auxiliar del sector Orión aseguró la zona y coordinó el desalojo ordenado de más de 800 asistentes. La Dirección General de Gobierno de la demarcación también hizo presencia para iniciar la revisión administrativa del inmueble, en cuyo interior se desarrollaba una fiesta sin los permisos correspondientes.

“Hace unos momentos evitamos una tragedia en Magnolia 174, colonia Morelos. Blindar Cuauhtémoc es prevenir antes de lamentar. Aquí no fallamos: protegemos, respondemos y llegamos a tiempo”, señaló la alcaldesa Alessandra Rojo de la Vega en un mensaje a medios y en sus redes sociales.

El Gobierno de Cuauhtémoc reitera el llamado a madres, padres y personas cuidadoras a mantenerse alertas sobre los eventos a los que acuden adolescentes y a reportar cualquier actividad irregular en sus colonias a la línea de Base Diana: 55 23 30 10 16.

Las acciones de verificación y vigilancia en salones de eventos continuarán, especialmente aquellos ubicados en zonas donde se han recibido denuncias ciudadanas por consumo de alcohol en menores de edad, riñas o aglomeraciones sin control. El objetivo es claro: evitar tragedias y proteger la vida de quienes viven y transitan por el corazón de la ciudad.