En el primer conversatorio Beatriz Paredes mostró dominio de la escena con entereza, conocimiento, experiencia, destreza, y tener en un claro un proyecto de nación para rescatar a México y frenar la regresión que se está viviendo. No dejó de destacar la necesidad de cambiar al sistema político mexicano y su cierre fue el más brillante.
“Muchos dijeron que mi salud era precaria, que no tenía condiciones para participar en el Frente. Dijeron que una fractura que lleva tiempo de rehabilitación era un asunto que me incapacitaba para siempre.
Como otros dijeron que por ser tlaxcalteca, quienes tenían una memoria histórica trasnochada no permitirían que participara yo en la Ciudad de México.
Como dijeron que no podría ser Gobernadora porque era hija de una familia de San Esteban Tizatlán, indígena de origen y tenía 32 años.
O como dijeron que no llegaría a dirigir la Confederación Nacional Campesina porque era la primera mujer que pretendía liderar a los machos mexicanos, ejidatarios que tenían la tierra gracias a la Revolución social que distribuyó más de la mitad el territorio.
Como dijeron que el PRI no sabría asimilar la derrota en el año 2000, que no tendríamos la capacidad de conducir la transición democrática y la bancada mayoritaria en el Congreso en la Cámara de Diputados que encabecé fue el pilar para que el Gobierno de la transición pudiera gobernar.
Nosotros sabemos gobernar, sabemos enfrentar la problemática más compleja que pueda enfrentar este país, sabemos encontrar las soluciones que se requieren convocando a todos los grupos sociales de la Nación, porque entendemos la necesidad de renovar al Estado nacional, porque comprendemos que es indispensable que sea el Estado de Derecho el que prevalezca y que es esencial que el crimen organizado no rebase a la autoridad.
Eso es lo que se va a definir en el 2024, no la gestoría de las cosas que son trascendentales, pero lo que está en disputa es el Poder del Estado Mexicano y la vigencia, la sobrevivencia de la Nación conducida por la Constitución y no por los grupos del Poder fáctico obscuro, es la victoria de la luz sobre la oscuridad.
Yo no estoy obsesionada por Andrés Manuel López Obrador, es un accidente histórico por los errores que cometimos, es un accidente histórico porque no tuvimos la capacidad cuando la sociedad nos dio, en repetidas ocasiones, la oportunidad de gobernarla, de resolver la problemática de los marginados.
Ese es nuestro gran desafío, gobernar para todos, pero sobre todo, gobernar bien y con un compromiso por la justicia y la modernidad” .
