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26.08.2025. EUA.- Durante una reunión de gabinete liderada por el presidente Donald Trump en la Casa Blanca, el Secretario de Estado Marco Rubio destacó que por primera están combatiendo a quienes amenazan la seguridad nacional de EE.UU.
“Por primera vez en la era moderna, estamos realmente a la ofensiva contra los cárteles organizados que están inundando nuestras ciudades con veneno, veneno mortal”.
Reveló que la colaboración de países como Ecuador, Paraguay, Guyana, Trinidad y Argentina, quienes, dijo, se han unido a los esfuerzos para combatir el narcotráfico en aguas internacionales.
“Una cosa es detener la entrada de drogas y estamos teniendo incautaciones récord. Pero otra cosa es construir una coalición internacional contra este flagelo a nivel internacional”, abundó.
Marco Rubio sostuvo que la estrategia no busca únicamente detener la entrada de drogas a territorio estadounidense, sino también “crear una red global” para erradicar el origen del problema.
En las últimas horas se confirmó que Estados Unidos ordenó el despliegue de más embarcaciones militares hacia el sur del Caribe como parte de la estrategia del presidente Donald Trump para enfrentar a los carteles de la droga latinoamericanos.
Reuters, reveló que el USS Lake Erie, un crucero de misiles guiados, y el USS Newport News, un submarino de ataque rápido con propulsión nuclear, se dirigían a la región para llegar a la zona la próxima semana.
Las fuentes, que solicitaron mantener el anonimato, no ofrecieron detalles sobre la misión específica, pero señalaron que el movimiento busca contrarrestar a “organizaciones narcoterroristas” designadas como amenaza para la seguridad de Estados Unidos.
Despliegue aéreo militar que se suma a un despliegue previo anunciado la semana pasada, que incluyó el envío de un escuadrón anfibio compuesto por los buques USS San Antonio, USS Iwo Jima y USS Fort Lauderdale, con unos 4.500 efectivos a bordo, entre ellos 2.200 infantes de marina.Estas
Con estas medidas, Washington busca intensificar la presión contra redes de narcotráfico que, según las agencias estadounidenses, “han expandido sus operaciones en el Caribe y representan una amenaza directa a su seguridad nacional”.