El adios de Chabelita .

El próximo viernes 18 de noviembre, la magistrada presidenta del Tribunal Superior de Justicia y del Consejo de la Judicatura, Isabel Inés Romero Cruz, alias Chabelita, rendirá su tercero y último informe, con ello se despedirá de ese maravilloso regalo cuatrotero, que no le cayó del cielo como ella hubiera querido, sino de Palacio de Gobierno.

La cita, será allá en la sala grande del teatro del Estado, el speech de Chabelita seguramente será larguísimo, ya que si no es ahora ¿Cuándo? De invitados selectos y solo del gobierno, nadie de la sociedad civil, ni mucho menos académicos o colegios de abogados, ellos sí son muy exclusivos en sus eventos, jamás invitan a nadie que no milite en el MORENA, está bien que sean así, antes a ellos no los invitaban a nada y no es indio el que no se venga.

Luego del excelso mensaje, los magistrados de la 8ª Sala, le están organizando una comida sencilla a Chabelita, para la que se solicitó la cooperación voluntaria de a fuerza, porque el Poder Judicial, no tiene ni para los canijos sapos de los inodoros, menos para andar organizando comidas banales.

El ágape será en el salón Nube, que por cierto es de Américo Zúñiga y está enfrente de el super Che de Ignacio de la Llave, la verdad es que el salón es   para fiestas infantiles, pero ni modo, fue el que encontraron más económico, para la comida contrataron un banquetero, que servirá de entrada unas bolas de queso philadelfia con bolillos, luego habrá cremita de coliflor con azafrán, que seguro a Chabelita y a los magistrados de su generación, les va a caer bomba; luego habrá una ensalada de lechuga con espíritus de jamón serrano y de plato fuerte, como no les dio el presupuesto, ni para la famosa suprema de pechuga de ave, servirán lasaña con salsa boloñesa y de guarnición verduras, de tomar aguas frescas y cada quien deberá llevar su alcoholito, vino o capaz y hasta llegan con caguamas.

Todos los magistrados, deberán caerse con 2 mil 500 pesos por piocha, para que salga lo de la comida, la loza, porque ni modo que en platos desechables ¿Verdad? El dj, las aguas, los hielos y los meseros, pero bueno, al menos ya no será la barbacoa que les sirve Joana Bautista, la directora de administración y finanzas; que esa sí que les cae pesadas a los magistrados viejitos.

Hablé con varios magistrados, dijeron cooperarán pero no asistirán, es de entenderse, la verdad es que Justiniano el Grande, se volvería a morir de ver a Chabelita de presidenta del Poder Judicial en Veracruz y es que la señora será recordada por haberle exigido al personal de los juzgados, cooperación para los canijos sapos de los inodoros y las escobas, porque su gestión ha sido de lo más mediocre, que se pueda recordar en el Poder Judicial veracruzano, así que casi todos los magistrados, quieren transitar a diciembre y olvidar a Chabelita.

Este será el último evento de Chabelita, quien dejará la silla a otra mujer, como es de esperarse, la próxima presidenta del Poder Judicial, habrá de trabajar un año con doña Rocío Nahle, así que habrá que escoger a alguien afín y seguramente hasta palomeada por ella.

Ayer visitaron Tuxpan, la próxima presidenta de México Claudia Sheinbaum y la próxima gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle, ¿Acaso habrá sido el destape de doña Claudia en Veracruz? Las dos señoras estuvieron acompañadas por el gobernador García Jiménez y el pretexto fue una conferencia magistral que dictó la doctora Sheinbaum.

Con la novedad de que doña Cecilia Guevara, se quedó con las ganas de presidir la comisión de Vigilancia del Congreso Local, también se quedó con las ganas de auditar a su hijo Fernando, el subsecretario de la SIOP y lo peor, es que al parecer el fin de semana, tuvo que ser desalojada de las oficinas de la presidencia de la Mesa Directiva en el Congreso Local, para irse seguramente al ala de los olvidados, en el vetusto edificio de la calle Encanto.

La marcha por la democracia, no estuvo desangelada, ni vacía, la negación es el primer error, la ceguera que provoca el poder es terrible, hay descontento social en México, negarlo será un grave error.

Así las cosas queridos míos, nos leemos mañana.