El apoyo de Morales Lechuga .

  • Sin tacto – Sucesión UV (36)

 / Por Sergio González Levet /

El pasado jueves 28 de agosto, un grupo de estudiantes de la Facultad de Psicología de la UV tomó las instalaciones de su escuela. Los muchachos se declararon en paro permanente en contra de la prórroga que concedió la Junta de Gobierno a Martín Aguilar para que fuera investido por otros cuatro años como Rector, sin que mediara el proceso de designación específico y puntual que señalan las leyes universitarias.

Dentro de su movimiento, los alumnos solicitaron a la sociedad civil apoyos para continuar con su plantón, para lo cual necesitaban agua, alimentos y algunos otros enseres para soportar a pie firme la espera, la presión y las inclemencias del tiempo atmosférico.

El licenciado Ignacio Morales Lechuga, uno de los notarios más reconocidos de la Ciudad de México, exsecretario de Gobierno, exprocurador general de la República, exembajador de México en Francia, originario de Poza Rica y por tanto veracruzano de cepa, mostró su solidaridad con los jóvenes y se comunicó personalmente con miembros de la RedUV por la Legalidad a fin de hacer una aportación económica en favor de los paristas con el fin de que se alimentaran debidamente.

De las pláticas con el movimiento que agrupa a cientos de universitarios de todos los talantes y a muchos prestigiados académicos e investigadores se llegó al acuerdo de que el Notario haría un depósito que recibirían de inmediato los psicólogos en ciernes.

Sin embargo, los jóvenes decidieron mejor no aceptar el donativo de Morales Lechuga debido sobre todo a que personas afines al Rector habían mandado a publicar notas en las que se dudaba de las buenas intenciones del prestigiado Notario Público no, 116 y se deslizaba el supuesto de que había interesas ajenos a la UV que estaban interviniendo en el conflicto con el objetivo de tomar el control de la Universidad.

Nada más ajeno a esa intención que el gesto de Ignacio Morales lechuga, quien ofreció su apoyo incondicional a jóvenes que están luchando por recibir una educación de calidad, que sea impartida por personas con ética, conocimientos y prestigio.

El donante entendió el razonamiento de los muchachos, que los llevó a la negativa de aceptar la ayuda con el fin de mantener su movimiento fuera de toda sospecha. Este martes, don Ignacio recibió de vuelta su aportación y trasmitió a los estudiantes de psicología su comprensión y su deseo de que triunfen en su aspiración inmediata y en su futuro.

Así, el movimiento en contra de la prórroga que se auto-otorgó Martín Aguilar a través de la Junta de Gobierno se mantiene impoluto en sus motivaciones. Sus participantes continúan con la fuerza moral que les da tener la razón y el hecho de que buscan genuinamente lo mejor para la máxima casa de estudios de Veracruz, y que siga siendo arte, ciencia y luz para el estado y las generaciones que vienen emergiendo.

 

sglevet@gmail.com