/ Norma Irene De La Cruz /
En el laberinto político donde las voces femeninas a menudo chocan contra muros de prejuicios, el Instituto Nacional Electoral (INE) se posiciona como un agente de cambio en defensa de los derechos políticos electorales de las mujeres. Esta columna no es solo un relato; es un testimonio de cómo el INE se convierte en aliado inquebrantable en la lucha por la igualdad y contra la violencia política de género.
Cada día, las mujeres en la política se abren camino a través de un mar de desafíos, y el INE ha sido clave en este viaje. Con herramientas como el protocolo para la atención de víctimas y la tramitación de quejas, el INE no solo responde, sino que anticipa y combate la violencia política de género.
Los datos hablan por sí solos: 114 casos de violencia digital, 59 medidas cautelares solicitadas, y un sorprendente número de mujeres también denunciadas por ejercer violencia. Estas cifras no son meras estadísticas; son historias de resistencia y superación.
En el corazón de este esfuerzo están las historias de mujeres que, a pesar de enfrentar la adversidad en el ámbito digital y físico, se levantan para reclamar su espacio legítimo. El INE, a través de sus acciones y protocolos, no solo proporciona un escudo, sino también un megáfono para que sus voces sean escuchadas.
Como Consejera Electoral, he sido testigo de cómo el INE ha transformado desafíos en oportunidades. Pero el camino hacia una igualdad total aún es largo. Me pregunto: ¿cómo podemos mejorar y adaptar nuestras estrategias en un mundo digital en constante cambio? ¿Cómo aseguramos que cada mujer en política sienta el respaldo inquebrantable del INE?
Las acciones que desde el INE estamos realizando para brindar una protección integral a las mujeres que denuncian los casos de violencia política, partiendo desde la atención de primer contacto que se brinda a las posibles víctimas por parte del personal que tenemos tanto en las oficinas centrales como en cada uno de nuestros órganos desconcentrados, y hasta el seguimiento final que se da a los asuntos por parte del personal de la Unidad Técnica de lo Contencioso Electoral.
La atención de primer contacto en la tramitación de las quejas por VPMRG, es el primer acercamiento con la víctima y resulta trascendental para brindarles confianza y hacerles saber que cuentan con diversos mecanismos para asegurarles su integridad y puedan preservar su entorno de vida.
En el INE contamos con personal capacitado y sensible a las necesidades que requiere el acompañamiento y asesoramiento que debe darse a este tipo de casos; además, hemos incorporado diversos mecanismos que nos facilitan el acercamiento con las víctimas, ya sea a través de su presentación en las oficinas; o bien, a través de llamadas telefónicas, videollamadas y hasta correo electrónico, siempre preservando la seguridad y confort de la persona.
La democracia se nutre de voces diversas, y la violencia política de género es un obstáculo que todos debemos erradicar. Desde el INE, reafirmo nuestro compromiso con la paridad y la seguridad de las mujeres en política. A la sociedad y a las mujeres valientes: sigan luchando, denuncien, porque en este camino hacia la igualdad, ninguna está sola y la cultura de la denuncia es el primer paso para hacer visible la violencia y para que el Estado, a través de sus instituciones, la combata, sancione y eventualmente la erradique.