*Línea Política .
/ Agustín Contreras Stein /
COMO a nivel nacional, también en Veracruz, existe en este momento la esperanza de que haya un buen gobierno. Ya van quedando atrás aquellos desafíos de la campaña política y solamente aquellas personas que entienden los desacuerdos que se dan en estas luchas políticas podrán sentirse satisfechas de que son verdaderos políticos. El rencor político no sirve de nada y de eso hay bastantes ejemplos a lo largo de la historia política de un país o de un Estado, como es el caso de la entidad veracruzana, donde pronto se hará el cambio de poderes con la finalidad de renovar esfuerzos para salir adelante en los retos que tienen los veracruzanos, en general.
Rocío Nahle García, no es veracruzana de nacimiento, pero sí una avecindada que seguramente conoce los diversos problemas que tiene Veracruz. Su interés por hacer política en la entidad y gobernar a uno de los Estados más importantes del territorio nacional, deberá demostrarlo plenamente con un trabajo que satisfaga a la mayoría de los veracruzanos, después de la amarga experiencia que se tuvo con un gobernador que, siendo veracruzano por nacimiento y cercano personaje a la vida política de la propia capital veracruzana, desperdició la gran oportunidad de destacar en la vida política por su trabajo y por su plena voluntad de gobernar en favor de todos.
¡Lástima!, como sería el caso del famoso Margarito, personaje de conocido programa de televisión que tuvo su auge en el pasado, para Cuitláhuac García Jiménez, ya no habrá ¡hay para la otra!, porque su vida política parece que ya terminó luego de que ni siquiera lo han tomado en cuenta por sus contribuciones a la cuarta transformación que tanto le hizo creer el mismo presidente de la república. Hoy, el panorama político es otro y se espera que el rencor político, si es que lo hay, no se lo pase en buscar venganza política.
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NO HAN PARADO LA REFORMA JUDICIAL
NO SE VE BIEN el panorama judicial de México, luego de que, con varias violaciones a la ley, a los procedimientos legales y a la no atención a los amparos promovidos por personas y organizaciones interesadas en el debido proceso para una enmienda constitucional de esta naturaleza, se siga adelante con los nuevos lineamientos que se establecen en la reforma. Está claro que a la fuerza ni la comida es buena y de ahí podría entenderse que la aplicación de la reforma es una necedad que irremediablemente está cayendo en una especie de dictadura que se impone desde la sola mayoría legislativa.
No se han detenido, para nada, en atender los reclamos de una gran parte de la población mexicana, compuesta por juristas, por gente interesada en los resultados de estas reformas judiciales, por la propia opinión generalizada del pueblo y de algunas otras menciones que han llegado desde el ámbito internacional, lo que significa que no se quiere ceder, ni siquiera para el análisis serio, concienzudo del tema que ocupa a todos los mexicanos, tan solo por quedar bien con un pasado reciente que ya no está, cuando menos formalmente, en el país.
Hasta ahora, mucho han picado al panal, hasta que las avispas decidan salir de su nido para hacerles ver que ese no es el camino de México, sino, tal vez, de otro país, ajeno a nuestras costumbres y al ejercicio permanente de nuestros principios de respeto, legalidad y valores constitucionales.
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EL INFORME DE LABORES MUNICIPAL
SERÁ, SI OTRA COSA NO SUCEDE, el próximo veintiocho de noviembre cuando el alcalde de Xalapa, Ricardo Ahued Bardahuill, rinda su tercer y último informe de labores, aunque la administración municipal continuará hasta terminar con el mandato constitucional de los cuatro años de gobierno. Habrá relevo en el mando municipal, por razones ampliamente conocidas en que el actual presidente municipal, tenga que solicitar licencia para separarse de su cargo. Quien se hará responsable, en el futuro, del último tramo del gobierno municipal correspondiente a este ejercicio constitucional, será el alcalde suplente Alberto Islas Reyes, un académico y excelente profesional del derecho.
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Y MAÑANA, aquí nos encontraremos, si otra cosa no sucede.
