*Dice el secretario de seguridad Pública Omar García Harfuch que a más de 48 horas aún no ha sido identificado. Foto redes el Mitotero en Facebook
03.11.2025 México.- A dos días del asesinato del presidente municipal de Uruapan, Carlos Alberto Manzo Rodríguez, ocurrido la noche del 1 de noviembre de 2025 durante el Festival de las Velas, las autoridades no han revelado la identidad del agresor abatido en el lugar.
De acuerdo con versiones preliminares, se trataría de un joven de entre 17 y 19 años, cuya participación en el crimen ha despertado inquietudes sobre el posible uso de menores como ejecutores en operaciones vinculadas a intereses políticos y criminales.
Los nuevos datos sobre el asesinato del alcalde Carlos Manzo revelan que el presunto sicario habría recibido 50 mil pesos por cometer el crimen, según información difundida.
En los diversos videos grabados durante el evento público, que están siendo examinados, se observa al agresor un joven con sudadera gris siguiendo de cerca al alcalde mientras carga a su pequeño en brazos.
Testigos aseguran que el atacante esperó el momento preciso para acercarse y disparar, justo cuando el alcalde cargaba a su hijo en brazos, durante el Festival de las Velas.
Tras asesinar al alcalde con 7 tiros, el agresor fue abatido por los elementos de seguridad que resguardaban el acto, mientras que otros presuntos implicados fueron detenidos por las autoridades.
De acuerdo al secretario de seguridad y protección ciudadana, Omar García, no hay indicios de que los policías municipales, encargados de la seguridad del alcalde de Uruapan, tengan nexos con el crimen organizado. Sostuvo que uno de esos elementos fue el que abatió al agresor del eduil.
García Harfuch definió que el papel de la Guardia Nacional era la de funciones de seguridad periférica durante el evento, mientras que la protección directa estaba a cargo de escoltas municipales.
Tal como ha sucedido en países integrantes del eje bolivariano-Cuba, recientemente en Colombia, cuando un menor de edad ejecutó a Miguel Uribe, serio aspirante a la presidencia de ese país y fue arteramente ultimado en una plaza pública. Hipótesis que se fortalece cuando se sabe que alguno de los 7 carteles que se disputan la explotación y la extorsión de limoneros y aguacateros de Michoacán tienen en sus filas a ex militares y narcos colombianos.
El ataque, que se produjo en pleno centro de Uruapan y frente a cientos de asistentes, dejó siete casquillos percutidos y un arma calibre 9 mm asegurada. Manzo Rodríguez fue revivido en la escena del crimen pero al trasladado aun con vida a un hospital, falleció minutos después debido a la gravedad de las heridas.
La hipótesis de que el joven abatido sabía que sería asesinado tras cumplir su cometido ha cobrado fuerza entre analistas locales, quienes comparan el caso con el atentado contra el político colombiano Miguel Uribe, en el que menores fueron utilizados como ejecutores para eliminar figuras que obstaculizaban intereses político- criminales.
En ambos casos, se advierte un patrón de reclutamiento de jóvenes inexpertos, sin formación profesional, que difícilmente podrían haber sorteado los dispositivos de seguridad sin apoyo logístico o complicidad interna.
La presencia de la Guardia Nacional y de la policía municipal en el evento no impidió el ataque, lo que ha generado cuestionamientos sobre la eficacia de los protocolos de protección y la posible infiltración de redes criminales en estructuras de seguridad.
El hecho de que el agresor abatido no haya sido identificado oficialmente, pese a haber muerto en el lugar, refuerza la sospecha de que fue reclutado de manera forzada o que su perfil fue deliberadamente mantenido en el anonimato para encubrir a los autores intelectuales.
Menores reclutados
El reclutamiento de menores por parte del crimen organizado es un problema grave y persistente en Michoacán, un estado identificado como zona de alto riesgo. Se estima que miles de niños, niñas y adolescentes están en riesgo en la región, y las organizaciones civiles reportan casos específicos de reclutamiento forzado.
Datos Clave
Cifras de Riesgo: A nivel nacional, se estima que entre 145,000 y 250,000 niños, niñas y adolescentes podrían estar en riesgo de ser reclutados por el crimen organizado. Estudios sugieren que entre 30,000 y 35,000 adolescentes son víctimas de reclutamiento cada año en México.
Zonas Afectadas: Michoacán, junto con Baja California, Guerrero, Guanajuato y Zacatecas, es uno de los estados con mayor concentración de este problema. La región de Tierra Caliente en Michoacán ha reportado casos específicos, donde pobladores denuncian el reclutamiento forzado de jóvenes por grupos como el CJNG y LNFM ( La nueva Familia Michoacana).
Roles y Engaños: Los menores son utilizados como informantes (“halcones”), mensajeros, narcomenudistas e incluso sicarios. A menudo son contactados con engaños, como falsas ofertas de trabajo, y luego forzados a unirse a campos de adiestramiento clandestinos.
Factores de Riesgo: La pobreza, la exclusión social, la deserción escolar y la falta de oportunidades son los principales factores que aprovecha el crimen organizado para reclutar a los menores.
Respuesta Institucional y Desafíos
Falta de Tipificación del Delito: A septiembre de 2025, el reclutamiento forzado de menores no está tipificado como un delito específico en la legislación mexicana, lo que dificulta su persecución legal efectiva.
		











