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24.10.2023. Ciudad de Mexico.- Con un mensaje en sus redes sociales el Senador Alejandro Rojas Díaz Durán desmintió las declaraciones de Eduardo Ramírez, presidente de la Jucopo en el Senado de la República, y afirma que el morenista estuvo informado en todo momento de la invitación a la ministra Presidenta de la SCJN, Norma Lucia Piña.
“Es completamente falso que haya invitado a título personal a la ministra Norma Piña, presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Mi coordinador y amigo, el senador Eduardo Ramírez, presidente de la Jucopo en el Senado de la República, estuvo informado en todo momento.”
Rojas Díaz Durán detalla en su escrito los diversos momentos en que públicamente se ha girado la invitación a la ministra Presidenta y titular del poder judicial, que incluso han quedado plasmadas en el diario de debates.
Alejandro Rojas destaca la importancia del diálogo entre poderes y llama a frenar la regresión política que está dejando el clima de polarización
ideológica que erosiona la legitimidad de las instituciones republicanas.
En la víspera el coordinador de la mayoría en el Senado, Eduardo Ramírez, llamó politiquería a la invitación de legisladores a la ministra Norma Piña.
Incluso aseguró que como titular de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), no existe una invitación formal a la ministra presidenta de la la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, por parte de esa instancia legislativa.
Por su parte el frente de senadores de oposición denunció una actitud antidemocrática del coordinador de Morena.
Además el bloque de contención denunció que las comisiones dictaminadoras sesionarían este martes a las 8 de la mañana del martes para aprobar por fast track la reforma que extingue los 13 fideicomisos.
Mensaje a la opinión pública y a los medios de comunicación:
Cerrar la puerta del Senado de la República al diálogo civilizado, democrático y respetuoso con el Poder Judicial de la Federación representa una regresión política, especialmente en el contexto de este clima de polarización ideológica que erosiona la legitimidad de las instituciones republicanas.
El diálogo y la colaboración entre los poderes de la Unión es un mandato constitucional, basado en el equilibrio democrático y en los contrapesos entre dichos poderes.
Es completamente falso que haya invitado a título personal a la ministra Norma Piña, presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Mi coordinador y amigo, el senador Eduardo Ramírez, presidente de la Jucopo en el Senado de la República, estuvo informado en todo momento.
Esta acción se enmarca en el seguimiento a la invitación que nuestro grupo parlamentario extendió durante una conferencia de prensa en la sede del Pacto Federal el miércoles 18 de octubre. Dicha conferencia fue encabezada por nuestro vocero, el senador César Cravioto. En ella, se hizo una invitación pública a dialogar con la ministra presidenta, reconociendo su papel representativo en el Poder Judicial.
Ese mismo día, y como queda registrado en el diario de debates, durante el pleno sobre la minuta de la Cámara de Diputados relativa a los fideicomisos del PJF, el senador Cristóbal Arias, representando al Grupo Parlamentario de Morena, reiteró la invitación a la ministra Piña.
Posteriormente, mediante la invitación que suscribí, contribuí a formalizar el llamado previamente extendido por las senadoras y los senadores de Morena a la ministra presidenta.
La noche del domingo, tuve la oportunidad de informar al senador Eduardo Ramírez acerca de la aceptación de la ministra Piña a nuestra propuesta de diálogo, ya que tuvieron la amabilidad de comunicarme de su disposición a conversar con los representantes del Pacto Federal.
Los hechos hablan por sí mismos y las evidencias están al alcance de todos.
Enfatizo, además, que el diálogo entre los poderes de la República no solo es deseable y necesario, sino una obligación constitucional.
Lamentablemente, parece que perdemos la oportunidad de abrir espacios políticos para un diálogo democrático tan necesario y valioso para el bienestar del pueblo mexicano.