*La Espinita
/ Andy S. K. Brown*. /
Ejército – Ernestina: mal y de malas
Sergio Salomón se “destapa” para SG
Al secretario de la Defensa del segundo piso de la 4T no le queda otra que no sea la de aplicar el apotegma que en varias mentiñeras hemos escuchado de labios de la señora Claudia Sheinbaum:
¡Que tome chocolate y pague lo que debe!…
… aunque el adeudo no sea menor y ascienda a 9 mil 534 millones de pesos, un par de miles de milloncejos más que los que originalmente le reclamaba el SAT al empresario Ricardo Salinas Pliego, a quien le fueron creciendo el adeudo desproporcionadamente por cuestiones políticas y no de técnica fiscal.
Su acreedor, mi general, es contratista consuetudinario de la Secretaría de la Defensa Nacional y su biografía bien merecería que Netflix o alguna otra plataforma la llevara al streaming, vocablo este último recién incorporado a nuestro idioma por la Real Academia.
El socio fundador de Security Tracking Devices –que vendió el software espía Pegasus a los gobiernitos de FCH, EPN e incluso AMLO– es Susumo Azano Moritoni, quien estuviera preso en el Reclusorio Sur de CDMX donde recibió cuidado especial, a petición de CSG, entonces titular del Ejecutivo.
Fue el constructor de la mega planta de Nissan en Aguascalientes; la de Honda, en El Salto, Jalisco; la de leche Lala, en Guadalajara, y Reino Aventura y Plaza de las Estrella en el entonces DF. También es socio de la empresa que fraccionó el lujoso Puerta de Hierro en el área metropolitana de la capital jalisciense.
Llegó a los “bisnes” en la Defensa, a través del Gral. Moisés Augusto García Ochoa, quien compró el equipo de espionaje. La adquisición fue autorizada por Ernesto Cordero, quien a la sazón ocupaba la titularidad de la SHCP, y este último aprovechó al máximo Pegasus, desde una “cueva” que mantenía en el edificio del Paseo de las Palmas en cuya planta baja se ubica el carísimo restaurante Morton’s.
Cordero empezó por espiar a su contrincante por la postulación presidencial panista Josefina Vázquez Mota, pero le ganaron ambición y curiosidad y comenzó a intervenir los celulares del entonces gobernador Peña Nieto.
Y ahí comenzó la bronca. Cuando en la capital del EdoMex se percataron del espionaje al bien peinado ex mandatario ordenaron a la Sedena, donde el polémico general Salvador Cienfuegos fungía como oficial mayor, actuar contra García Ochoa, a quien de hecho “congelaron” desde entonces, y en Lomas de Sotelo empezaron a bloquear los pagos a la empresa de Azano Moritori.
Ahí empezó el litigio, que en la Defensa ya hasta habían dado por olvidado.
¡Y, tómala! Errores en el proceso, a tomar chocolate, ¡y a pagar, general Trevilla!
* * *
No estaría de más si algún entorchado militar lleva a un “brujo” de Catemaco a las instalaciones de la Defensa Nacional, donde están mal y de malas.
Por la execrable actuación de cuando menos tres de sus elementos, el Estado mexicano completito ha sido condenado por la Corte Interamericana de Derechos Humanos al descrédito internacional por la violación sexual, tortura y muerte de la indígena náhuatl Ernestina Ascencio Rosario, y la falta de acceso a la justicia en condiciones de igualdad para sus familiares.
Sucedió durante el mandato espurio de Felipe Calderón, cuando se dio línea para que se publicitara que la señora Ascencio había fallecido ¡de gastritis!
Se sostuvo la engañosa versión durante el peñato.
Y en el obradorato, por tratarse del Ejército, se defendió la especie calderonista.
En la actual Administración también ya se les había “olvidado” el tema.
¡Y pácatelas!
Mal y de malas… producto de la militarización que inició en 2006 y se ha llevado a lo máximo a partir de 2018.
* * *
Cuentan que al poblano Sergio Salomón ya “se le queman las habas” y por tal anda promoviendo que él será el próximo titular de Gobernación, en sustitución de la colega Rosa Icela Rodríguez.
Salomón, quien se hizo de la gubernatura de su entidad natal “a la mala”, tras el fallecimiento del titular Miguel Barbosa, dándole “madruguete” al propio AMLO quien no lo tenía contemplado como sucesor.
¿Estará planeando algo similar ahora desde las oficinas del Instituto Nacional de Migración, en la avenida Ejército Nacional, que está algo lejos del Paseo de Bucareli?
@AndySKBrown1
