Grupos anti derechos enaltecen embarazos producto de violencia sexual.

  • Más de mil embarazos adolescentes cada día.

Foto tomada de @CarlRamirezA

/ Por: Ana Alicia Osorio /testigo Púrpura /

05/10/2021/ Veracruz, n un país donde 32 niñas se convierten en madres cada día debido a situaciones vinculadas con violencia sexual, grupos antiderechos enaltecieron el embarazo infantil y adolescente.

Durante el fin de semana en varias ciudades del país, los autollamados grupos “provida” protestaron en contra del aborto y la despenalización.

Utilizando un sin fin de alusiones religiosas (Cristo Rey, Virgen María, entre muchas otras) hicieron sus actos.

La culminación de estos actos fue con un ultrasonido en vivo realizado a una niña de 15 años con un embarazo de 38 semanas (es decir casi por terminar) mientras que aplaudían el haber seguido con el mismo.

Lo que no señalaron estos grupos, es que el Instituto Nacional de las Mujeres ha indicado que se estiman en el año 11 mil 808 partos de niñas de 10 a 14 años.

En estas niñas, según han señalado organizaciones civiles y el propio gobierno de México, el embarazo es resultado de violencia sexual ya que no pueden brindar consentimiento debido a su edad (pues existen determinaciones legales al respecto).

Es decir, cada día al menos 32 víctimas de violencia sexual se convierten en madres.

Además, en esta marcha se festejó el continuar con embarazos que ponen en riesgo la vida de las niñas pues de acuerdo con la asociación civil Equifonía, en los últimos 10 años en México han muerto 45 menores de 15 años debido a complicaciones relacionadas con embarazos.

Además, entre adolescentes de 15 a 19 años se estima que en 2020 hubo 373 mil 661 nacimientos, es decir más de mil cada día.

Sin embargo la mitad, cinco de cada 10, que fueron encuestadas mientras estaban embarazadas, dijeron que no querían estarlo.

Otro de los problemas, que no fueron tomados en cuenta por parte de las organizaciones manifestantes, fueron los riesgos a la salud que representa para las niñas y adolescentes continuar con un embarazo.

“El embarazo adolescente, además de ser un grave problema social que afecta los proyectos de vida de niñas y adolescentes, también vulnera sus derechos fundamentales e implica una problemática de salud pública, al traer complicaciones durante el embarazo y el parto que pueden ocasionar problemas permanentes e incluso la muerte”, indica Inmujeres.

Además, otro aspecto que no fue mencionado por las organizaciones son las complicaciones en la vida que enfrentan estas niñas y adolescentes.

“Las madres adolescentes tienen un logro educativo mucho menor, perciben ingresos inferiores y presentan mayores niveles de desempleo. Tienen menor acceso a la seguridad social y a un empleo formal”, señala el Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA).