* La entidad guerrerense está pagando muy caro la incompetencia de Evelyn Salgado
* Mientras tanto, en la capital país Rosa Icela y María Luisa minimizan el caos
* Definen Mara Lezama y Raquel Buenrostro estrategias de crecimiento para QRoo
NO PASA NADA, NO PASA NADA.- En el México de las mañaneras no pasa nada de nada, todo el mundo está feliz, feliz, feliz. Ya no hay masacres, se acabó la impunidad y nadie es corrupto. Y si por azares del destino llega a filtrarse alguna información negativa que pudiera dejar mal parada a la 4T o al Presidente López Obrador, el inquilino de Palacio Nacional contrarresta los embates de su peor enemiga (la realidad) con su argumento predilecto: Se trata de una campaña sucia en contra de su gobierno, son embates de los medios controlados por la oligarquía y los conservadores. Por eso el caos que en estos momentos impera en Chilpancingo, Guerrero, no merece la más mínima atención presidencial. Afirma que la población está siendo manipulada y que las movilizaciones están siendo teledirigidas por sus adversarios. Sin embargo, en lo que refiere a esta coyuntura bien vale pena intentar ver la fotografía completa para entender lo que está haciendo el autonombrado “el gobierno más feminista de la historia de México”, pues en este conflicto están involucradas puras señoras: La alcaldesa de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández (la que se va a desayunar con Celso Ortega, presunto líder de la célula delincuencial conocida como “Los Ardillos” y se reúne con Heliódoro Castillo, presunto líder de “Los Tlacos”, otra banda de la región); la “gobernadora” Evelyn Salgado Pineda; la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana del Gobierno Federal, Rosa Icela Rodríguez; y la flamante titular de la Secretaría de Gobernación (SEGOB), Luisa Alcalde.
LA MANO QUE MECE LA CUNA.- Lo que en estos momentos impera en todo el estado de Guerrero, no sólo en el municipio de Chilpancingo, es la total ingobernabilidad. Punto. La señora Salgado Pineda no tiene ni el nivel ni el know-how para ser gobernadora y eso lo saben perfectamente bien todos los grupos del crimen organizado que operan en territorio guerrerense. Dicho coloquialmente, cuando no hay gato, los ratones hacen fiesta. Eso es justo lo que está ocurriendo en esa entidad del sur mexicano y nadie absolutamente nada. Quien controla y decide todo en ese estado, a larga distancia desde la CDMX, es el senador Félix Salgado Macedonio, no nos hagamos tontos. Y como don Félix, la alcaldesa Otilia, la “gobernadora” Evelyn, la secretaria de Seguridad Rosa Icela y la secretaria de Gobernación Luisa María todos pertenecen al Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) pues absolutamente todos se salen por la tangente y fingen demencia ante tan grave situación. Minimizan y desestiman la seriedad del asunto y el enorme riesgo que a diario corren los ciudadanos comunes y corrientes no sólo de Chilpancingo, sino también de Quechultenando, Mochitlán y otros más, pues viven en la total zozobra por los dos grupos delincuenciales con los que la alcaldesa Hernández Martínez se sienta a almorzar mientras que en SEGOB voltean para otro lado.
SINERGIAS PRODUCTIVAS.- Y pasando a noticias más agradables, ayer lunes la gobernadora de Quintana Roo, Mara Lezama, vajó a la capital del país para reunirse con la Secretaria de Economía (SE), Raquel Buenrostro. Durante este encuentro se lograron establecer las acciones y trabajos para detonar la economía de Chetumal, el estado y la región. Cabe destacar que los equipos, tanto del gobierno quintanarroense como de la SE, analizaron y trataron las características del estado, la conectividad logística, las oportunidades por sector y su potencial, la diversificación económica, creativa, cultural y gastronómica, así como la estimación de inversión de Chetumal para establecer su competencia económica; por lo que acordaron sumar esfuerzos para cumplir con la instrucción presidencial de, tras décadas de abandono, hacer que la capital de Quintana Roo recobre su esplendor y crecimiento económico. Además, se destacó que la gobernadora Lezama desde el inició de su administación está impulsando el Nuevo Acuerdo por el Bienestar y Desarrollo del estado con la convocatoria para que todas y todos los quintanarroenses, los sectores sociales, se sumen a la transformación profunda que permita cerrar las brechas de desigualdad entre el norte y el sur.
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