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/01/11/2022/Cimac Noticias/ Ciudad de México.- En México, la lista de periodistas y defensoras de derechos humanos asesinadas por ejercer de su labor sigue aumentando. Es por eso que este 31 de octubre, activistas y colegas suyos les rindieron un homenaje con una ofrenda en el Monumento a la Revolución, en el Centro de la Ciudad de México.
Dicha ofrenda forma parte de la campaña «Conocerles es Reconocerles» y fue organizada por Casa del Migrante Saltillo, Artículo 19 y Comunicación e Información de la mujer A.C. (CIMAC) en colaboración con la Unión Europea y con Naciones Unidas México.
Flores de terciopelo, cempasúchil, veladoras y canastos de fruta formaron parte del altar instalado en uno de los atrios del imponente monumento en el Centro Histórico. Y, entre las macetas y los pétalos anaranjados, colocadas con cuidado estaban las fotografías de las y los periodistas y defensores asesinados en lo que van del sexenio de Andrés Manuel López Obrador.
Desde que Obrador llegó a la presidencia, siete mujeres periodistas y 22 defensoras de los derechos humanos han sido asesinadas. Además de ellas, 49 comunicadores y 78 defensores hombres también han perdido la vida.
De acuerdo con Gloria Flores Ruiz, codirectora de la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos, en este país ocurre una agresión diaria contra mujeres periodistas o defensoras. Veracruz, Puebla, Chihuahua y la Ciudad de México son las entidades de la República con los niveles de incidencia más elevados en este aspecto.
«A quienes están atrás no les tocaba morir: alguien lo decidió así porque su trabajo les era incómodo», aseveró la periodista Pamela Cerdeira quien, como Gloria Flores, estuvo presente durante el homenaje para periodistas y personas defensoras.
Durante su participación, Cerdeira también recordó el caso de Lourdes Maldonado López, quien fue asesinada en enero de este 2022. Tres años de que la mataran frente a su domicilio en Tijuana, Baja California, la comunicadora se presentó en la conferencia matutina de López Obrador para pedir ayuda debido a constantes amenazas de muerte en su contra.
El desinterés ante la desesperación de Lourdes se replica todos los días en diferentes partes del territorio mexicano. Esto lleva a periodistas, defensoras y defensores a realizar su trabajo en condiciones de riesgo sin ninguna protección por parte de las autoridades locales y federales.
«Ante la ausencia de estas condiciones recibimos amenazas y distintas formas de violencia que nos llevan al desplazamiento forzado y al exilio con tal de salvar la vida», declaró Alberto Xicoténcatl, director de la Casa del Migrante Saltillo.
Es cierto que existen marcos como el Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas para subsanar estas condiciones de riesgo. Sin embargo, éstos no son completamente efectivos.
Muestra de ello es la reciente recomendación emitida por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para el titular del Mecanismo de Protección (Enrique Irazoque Palazuelos). Esto, debido a que ni él ni las autoridades de Guanajuato brindaron la protección debida a un defensor de derechos humanos en el estado.
En este sentido, Guillermo Fernández Maldonado —representante en México de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos—recordó que es necesario seguir exigiendo justicia, reparación y garantías de no repetición al gobierno mexicano. Para ello, agregó, debemos mantener viva la memoria y reconocer el trabajo de periodistas y personas defensoras.
Gautier Mignot, embajador de la Unión Europea en México, recordó que ellas y ellos juegan un papel esencial en nuestros tiempos: unos difundiendo información y otros defendiendo a vidas igual de valiosas que las suyas propias. Pese a eso, sus voces se siguen extinguiendo.
Es en medio de este panorama que «Conocerles es Reconocerles» intenta mantener sus llamas vivas. Y este 31 de octubre, con la ofrenda colocada en el Monumento a la Revolución, esas llamas siguen presentes.
Por Norma Sarabia, Alma Elizabeth Mares, Teresa Aracely Alcocer, María Elena Ferral, Lourdes Maldonado, Yesenia Aurora Mollined y Sheila Johana García. Por todas las periodistas que perdieron la vida antes de ellas. Por las y los defensores. Conocerles es reconocerles, recordarles y exigir justicia en su nombre.