Hospital D’María vs una madre

/ Yamiri Rodríguez Madrid /

En octubre del año pasado, la señora Kenia Reyes llegó al hospital D’María, en el Puerto de Veracruz, para dar a luz a su bebé. Desde ese momento su vida se ha tornado en un calvario.

Como es sabido, ese 10 de octubre pidió a la doctora Erika N, le practicara una cesárea, pero la galena se negó. El recién nacido no tenía signos vitales y la pediatra designada por Erika N no pudo reanimarlo, por lo que entonces personal médico les aconsejó a los familiares que el pequeño fuese llevado a la Torre Pediátrica del Hospital Regional “por no contar con neonatólogo”. Kenia perdió a su bebé el 21 de ese mes.

Fue entonces que la madre presentó una denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE), pero no se aceptó por homicidio, toda vez que el cuerpo del bebé había sido incinerado, por lo que la carpeta de investigación fue por los presuntos delitos de lesiones y malas prácticas médicas. Tras dos diferimientos, hace unos días, el 10 de enero, la juez encargada del caso ordenó a la FGE una investigación exhaustiva para deslindar responsabilidades.

Desde el fallecimiento del bebé, la señora Kenia ha señalado ineficiencias en el desempeño de la médico tratante, de su equipo y del personal médico y de enfermería del hospital y ha referido que en esa institución privada no había las condiciones para la atención del parto, puesto que la sala de cirugía se encontraba desaseada. También ha señalado falta de atención por parte de las enfermeras, quienes no le proporcionaron los cuidados necesarios al momento e hicieron caso omiso de sus requerimientos.

El hospital no solo ha estado callado en estos más de tres meses a pesar de los señalamientos. Sino que no ha tenido ningún acercamiento con la afectada No ha mostrado empatía por el caso. Ha apostado al olvido del tema.

Lo más grave es que la Dra. Erika N. continúa con su práctica profesional, sin que se le haya requerido por parte de la autoridad. Sin embargo, en sus redes sociales ha señalado ser “víctima” de acoso y temer por su seguridad. A eso hay que sumar que personal del hospital y médicos que atienden en el mismo -y de quienes nos reservamos los nombres por temor a represalias-. conocen de casos en que la Dra. Erika N. ha supuestamente tenido desempeños deficientes, incluso en otras entidades de la república, donde tuvo al parecer otros fallecimientos de pacientes.

Lo más triste es esa muestra de insensibilidad del Hospital pues, en diversas publicaciones, la Dra. Erika aparece como la “imagen” del Hospital D’María; en un descuido, con la presión mediática, ponen a algunos de los médicos venezolanos que recién han contratado. Nada ni nadie le va a devolver a su pequeño a esta madre, pero toda mala práctica médica, toda negligencia médica, debe ser sancionada o ¿en manos de quienes ponemos nuestras vidas?

Hay que estar muy atentos en qué termina el caso del Hospital D’María y lo que le hicieron a esta mujer.

@YamiriRodriguez