Interrupción legal del embarazo (ILE) es un tema de derechos humanos, salud pública y justicia social.

*#28S El día a favor de acciones globales por el aborto legal.

  • Marta Lamas, investigadora del Centro de Investigaciones y Estudios de Género, y luchadora feminista que ha marchado por la interrupción legal del embarazo desde hace más de 50 años, contesta para Gaceta UNAM.

01.10.2024 Ciudad de México.-  La interrupción legal del embarazo (ILE) es un tema de derechos humanos, salud pública y justicia social. La lucha por acceder a ese derecho tiene más de 50 años y cada 28S, en conmemoración del Día de Acción Global por el Aborto Legal, Seguro y Accesible, se llena de pañoletas y se pinta de verde como una exigencia. La marea verde avanza por los estados de la República mexicana, pero el camino para que en cada uno se tengan garantías para las mujeres y personas gestantes es todavía una ruta en proceso.

¿Qué significa la lucha por la legalización de la interrupción legal del embarazo (ILE) para los feminismos?

Significa la autonomía de las mujeres: la posibilidad de interrumpir un embarazo cuando no ha sido elegido. Implica reivindicar la autonomía sobre el propio cuerpo y la posibilidad de seguir un proyecto de vida.

Poder decidir sobre tu cuerpo, es un derecho básico.

¿El cuerpo de las mujeres es un territorio que pertenece a ellas?

Claro que nos pertenece. Las mujeres también estamos condicionadas por nuestra cultura, y aunque digamos que cada quien podría tomar decisiones sobre su propio cuerpo, hay muchos determinantes que a veces impiden llevar a cabo esas decisiones. Uno de ellos, muy importante, es la ignorancia; si hay desconocimiento sexual, si no sabes cómo controlar la fecundidad, te pasarán cosas.

No solamente es el hecho de decir: “Yo tomo decisiones sobre mi propio cuerpo”, requerimos un contexto en el que haya información que haga fácil, accesible y entendible lo que son los procesos sexuales.

La información también es una responsabilidad del Estado. Los derechos y el conocimiento van de la mano para poderlos ejercer.

¿Cómo ha madurado la idea de la interrupción legal del embarazo?

La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), como máxima autoridad jurídica, estableció un marco de interpretación, por lo cual las últimas legalizaciones que se han hecho en varios estados –Nayarit, Aguascalientes, Yucatán– han sido por amparos, los cuales han interpuesto las mujeres. A la hora de resolver el amparo, se hace con la resolución de la SCJN.

Tenemos un avance jurídico muy, muy amplio y también otro muy importante en el sentido médico, porque hace dos años se establecieron en el Instituto Mexicano del Seguro Social y en la Secretaría de Salud los lineamientos para la atención del aborto en todo el país.

La ILE es una batalla cultural, política y religiosa

Es una batalla cultural que se está dando en muchas partes del mundo y que tiene que ver con una concepción laica apoyada en la ciencia sobre qué somos los seres humanos, y si podemos o no tomar decisiones sobre nuestro cuerpo, en contra de una visión religiosa que dice: “Ten todos los hijos que Dios te mande, tú no eres dueña de tu cuerpo”.

Estigmatización y criminalización de la ILE en México

La criminalización está en los códigos penales. Si en los artículos de un código penal dice que a la mujer que se provoque un aborto le tocarán tantos años de cárcel, esto es criminalización, no sólo estigmatización.

Ejemplos de estigmatización: “son unas malas madres”, “son unas asesinas”, “son unas malas personas”, etcétera. Criminalizar a alguien es cuando su conducta se califica como un crimen, y en este momento en los códigos penales de 17 entidades federativas el aborto se considera un delito, un crimen.

La criminalización implica que el código penal estipule que si te provocas un aborto, estás cometiendo un delito.

¿Qué significan los retrocesos?

Los retrocesos tienen que ver con que somos una sociedad plural en la que sí hay una parte de ésta que comparte dichas ideas religiosas y políticas.

¿Qué nos falta?

Nos falta mucho más debate público. Necesitamos que en la televisión y en las redes se discutan mucho más los argumentos, además de las ventajas que implica que la interrupción legal del embarazo sea un servicio.

Hace falta que esto se vuelva un tema mucho más naturalizado en las escuelas, y que haya una verdadera educación sexual, por ejemplo, información acerca de los anticonceptivos. Siempre es mejor prevenir, que remediar un embarazo. Se debe realizar mucha difusión y educación sexual.

¿Cómo apoyar las acciones globales del #28S?

La movilización es muy importante. Primero: informarse, leer, debatir con la gente que está a nuestro alrededor. Todas las ciudadanas que estamos convencidas de que el aborto tiene que ser un derecho debemos discutir y hablar con la gente cercana, hay que asistir a las marchas y movilizaciones.


#28S

El 28 de septiembre se conmemoró el Día de Acción Global por el Aborto Legal, Seguro y Accesible desde 1990.

El 28S también se conoce como el Día por la Despenalización y Legalización del Aborto.


¿Qué es la interrupción legal del embarazo?

La ILE es una opción para el ejercicio de una maternidad libre, informada y responsable.

El acceso al aborto legal y seguro es parte esencial de los servicios de salud reproductiva a los que tienen derecho las mujeres. Se fundamenta en los derechos a la vida; la salud, incluida la reproductiva; la integridad física; la vida privada; la no discriminación y la autonomía reproductiva de las mujeres.

Estos derechos se encuentran reconocidos en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (Informe GIRE, 2021).


La maternidad como obligación

En México, como en otras partes del mundo, la maternidad está ligada a una fuerte idea de obligación; esto sucede en los ámbitos cultural, político y religioso. Sin embargo, es una violación a los derechos humanos que las mujeres no puedan tomar decisiones sobre su propio cuerpo. La lucha por esta decisión inició en México en la década de los años 70 del siglo XX.


¡El aborto va!

En México, el 26 de abril de 2007 la lucha de las mujeres logró las reformas al Código Penal y adiciones a la Ley de Salud, ambos del entonces Distrito Federal, por medio de las cuales se reconoce su derecho a interrumpir legalmente su embarazo durante las primeras 12 semanas de gestación.

El 4 de mayo de 2007, la Secretaría de Salud del Distrito Federal publicó una normativa interna acerca de los servicios de salud relacionados con la interrupción legal del embarazo.


Regulaciones estatales

Sin embargo, el aborto es regulado a nivel local y se considera un delito con excluyentes de responsabilidad penal o causales de no punibilidad, lo que significa que hay circunstancias por las cuales no se castiga o no se considera como un delito. Lo anterior configura un acto de discriminación jurídica, ya que las mujeres no se encuentran protegidas del todo para acceder a un aborto bajo un marco legal cuando depende de su lugar de residencia.

Despenalizar el aborto en los congresos locales representa abordar la interrupción legal del embarazo como un tema de derechos humanos, salud pública y justicia social. Requiere también una regulación en materia de salud.


El aborto con garantías para las mujeres y personas gestantes

El 7 de septiembre de 2021 la Suprema Corte de Justicia de la Nación resolvió como inconstitucional criminalizar el aborto de manera absoluta, y se pronunció por primera vez a favor de garantizar el derecho a decidir de las mujeres y personas gestantes, sin enfrentar consecuencias penales.

De 2007 a 2024 se han realizado 277,268 interrupciones legales del embarazo según la Secretaría de Salud del gobierno de la Ciudad de México.


¿Qué es la criminalización del aborto?

Según el Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE), la criminalización del aborto es la materialización de la idea de que la maternidad es la función obligatoria de las mujeres. Dicha idea, que representa una violación a los derechos humanos, sigue permeando no sólo la cultura, sino también en todas las instituciones del Estado.


Obstáculos y retrocesos

El Congreso de Aguascalientes aprobó una reforma para reducir a seis semanas de gestación, de un periodo previo de 12 semanas, como el límite para un aborto voluntario.


Consignas

  • ¡Mi cuerpo es mío, yo decido, tengo autonomía, yo soy mía!
  • ¡La maternidad será deseada o no será!
  • ¡Educación para decidir, anticonceptivos para no abortar y aborto legal para no morir!
  • ¡Maternidad libre y deseada!
  • ¡Ni muerta por abortar ni presa por intentar!
  • ¡Saquen el aborto del Código Penal!