*
25.09.2925 Un juez federal ordenó a la Administración Trump abstenerse de deportar a niños migrantes guatemaltecos no acompañados con casos de inmigración activos, mientras se resuelve un desafío legal.
El juez federal de distrito Timothy J. Kelly, designado por Trump, mantuvo vigente un bloqueo judicial anterior a la política, criticando duramente el argumento no probado de la Administración de que los padres de los niños querían que los deportaran.
La decisión del juez se produce después de que, en la madrugada del 31 de agosto, la Administración Trump intentara deportar a 76 menores guatemaltecos detenidos bajo custodia estadunidense en una medida sorpresiva, lo que provocó una demanda y una audiencia de emergencia que detuvo temporalmente la medida.
La subsecretaria de Seguridad Nacional, Tricia McLaughlin, insistió en un comunicado en las afirmaciones iniciales del Gobierno de que los padres solicitaron la reunificación familiar. “Este juez está bloqueando los esfuerzos para reunificar a los niños con sus familias. Ahora estos niños tendrán que ir a albergues”, señaló McLaughlin. “Todo solo para ‘atrapar a Trump’. Esto es vergonzoso e inmoral”.
Los defensores de los niños habían presentado ante el tribunal un relato de un denunciante que sugiere que muchos de los niños considerados elegibles para la deportación posiblemente habían sido víctimas de abuso infantil, amenazas de muerte, violencia de pandillas y trata de personas, indicó el juez Kelly en su orden.
Ya existía una orden temporal que impedía la deportación de menores guatemaltecos, pero expiraba el martes. Kelly otorgó una orden preliminar que extiende dicha protección temporal indefinidamente, aunque el gobierno puede apelar.
@ADNCuba/ADNAmerica