La canción feminista, herramienta de lucha, memoria y comunidad.

*Final del certamen convocado por CulturaUNAM.

*La ganadora del primer lugar fue Hermanas de la calle, composición de Martha Ximena Juárez Monzón, estudiante del posgrado en Filosofía de la Facultad de Filosofía y Letras
Roberto Frías / Cultura UNAM.

Foto: Hiram del Prado.

La final del Cuarto Premio de Canción Feminista demostró que la música sigue siendo un territorio de activismo, memoria y comunidad, fértil para que el feminismo siembre en él sus demandas y exija sus derechos.

El certamen, convocado por la Coordinación de Difusión Cultural de la UNAM (CulturaUNAM), a través de Casa del Lago, concluyó el 29 de noviembre en el Foro Alicia Urreta, frente a una audiencia intergeneracional que celebró la potencia del canto como herramienta política.

La canción ganadora del primer lugar fue Hermanas de la calle, composición de Martha Ximena Juárez Monzón, estudiante del posgrado en Filosofía de la Facultad de Filosofía y Letras; la pieza fue interpretada en vivo por Batallones Femeninos, colectivo de hiphop y artivismo originario de Ciudad Juárez.

El segundo puesto lo obtuvo Mariposa negra, de Abril Nadxieli Gómez Gordillo (de la Escuela Nacional de Lenguas, Lingüística y Traducción, UNAM), interpretada por June Caravan, proyecto juvenil que trae una fusión de influencias, entre las cuales destaca el rock, para narrar las inquietudes de las mujeres jóvenes.

El tercer puesto fue para Ama la cumbiaodia el fascismo, de Mercedes Adriana Portillo Elías (Talleres Libres de Danza UNAM), presentada junto a Kawsay, banda que desde 2020 combina góspel, son y ritmos tropicales para dialogar con la tradición y la comunidad.

El concurso, circunscrito en esta edición a la comunidad de la UNAM, nació a partir de un cartel que el equipo de Casa del Lago encontró al montar una exposición en sus instalaciones, mismo que recordaba este tipo de concursos, realizados en los años 80, explicó Cinthya García Leyva, directora de Casa del Lago.

Desde ese hallazgo, dijo, la iniciativa tomó cuerpo como un homenaje histórico a las prácticas feministas que usaron la canción para reclamar el espacio público y, al mismo tiempo, como una invitación contemporánea: recuperar la potencia de la voz para pensar la política, la poesía y la revuelta en clave musical dentro de la Universidad.

La directora subrayó que, tras cuatro ediciones, el concurso permite sostener una voz pública que mira a las ancestras, impulsa la creación contemporánea y reivindica la canción como herramienta de lucha y de comunidad. Además, se consolida como un foro en el que confluyen memoria, goce y posibilidad de transformación, aunque “falta muchísimo por hacer”.

Los votos

“Si no me causa emoción, no voto”, afirmó Ana Ruiz, pianista, compositora y pionera del free jazz en México, así como integrante del jurado. Con esa máxima declaró haber valorado no sólo la técnica sino la fuerza afectiva de las piezas: la emoción como brújula para medir el alcance político y estético de una canción feminista.

Para Ruiz, la escucha implicó leer las letras, volver a oírlas con la música y ponderar la interpretación en vivo; así se buscó que la selección final diera voz a propuestas que, más allá del virtuosismo, comunicaran un decir colectivo necesario.

“El arte está en la calle, el arte es para todas”, dijo Lilian Andrea Cuervo, La Cuervo, otra de las juradas, rapera y artista multidisciplinaria, quien resaltó la importancia de reconocer el hiphop como saber de la calle que dialoga con lo académico y expande el alcance del concurso. Su intervención puso en perspectiva el cruce entre experiencia empírica y espacios institucionales como Casa del Lago: una alianza que diversifica el panorama cultural.

La tercera jurada, Maby Muñoz Hénonin, pianista y coordinadora del Programa de Maestría y Doctorado en Música de la UNAM, dijo sentirse muy feliz de escuchar la voz de la comunidad, pues había al menos representantes de licenciatura, posgrado y talleres. “El feminismo empezó en la calle y comenzó con canto”, afirmó.

El acto reunió esfuerzos de múltiples instancias culturales y académicas: participaron Radio UNAM, Música UNAM, la Revista de la Universidad de México, la Facultad de Música, la Cátedra Rosario Castellanos de Literatura y Géneros, la Escuela Nacional Preparatoria, el Colegio de Ciencias y Humanidades, el Sello Jueves y Centro Integral para la Mujer a través de Violeta Radio. La ceremonia fue conducida por Al-Frida Zaldívar.

Los reconocimientos incluyeron premios en efectivo: 10 mil pesos para el primer sitio, 7 mil pesos para el segundo y 4 mil pesos para el tercero, además de la transmisión y estreno radial de las finalistas en Radio UNAM y Violeta Radio. Asimismo, las ganadoras recibirán un taller de profesionalización y registro de obra impartido por Sello Jueves, que también apoyará el lanzamiento del sencillo ganador.

Gaceta UNAM