Los miles de despedidos de dependencias públicas federales tuvieron ayer en el PRD una voz a su favor. La diputada perredista Verónica Juárez demandó al gobierno federal respetar los derechos laborales y suspender cualquier acción que vulnere las garantías de los empleados públicos, sea cual sea el régimen laboral que los rija. Además de los despedidos del Servicio de Administración Tributaria (SAT) los hay también, entre otras secretarías, en las de Gobernación, Agricultura, Bienestar, Economía, Comunicaciones y Transportes, Turismo, Trabajo y Previsión Social, Energía, Medio Ambiente y de la Función Pública. También en el INBA, Conagua, Condusef, en la Comisión Reguladora de Energía (CRE), Nafin, Bancomext y la Fepade. Sólo que a la preocupada legisladora por los derechos labores de los burócratas se le olvidó mencionar a los despedidos de su propia casa, el PRD, quienes no eran trabajadores eventuales ni por honorarios, sino empleados sindicalizados, militantes y hasta fundadores de ese partido, que han sido despedidos, varios de ellos no en los mejores términos. El buen diputado por su partido empieza. Lo escriben en Bajo Reserva de El Universal
