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/ Víctor Hall Díaz /
Marilyn vos Savant fue reconocida por el Libro Guinness de los Récords como la persona con el coeficiente intelectual más alto jamás registrado con un total 228 puntos, muy por encima de Einstein (160-190), Hawking (160) o Musk (155).
A los 10 años, ya había leído los 24 volúmenes de la Enciclopedia Británica y también había memorizado libros completos. Su sorprendente capacidad apuntaba a que sería una figura académica qué deslumbraría el mundo entero. Pero su camino fue distinto.
En lugar de seguir una carrera científica tradicional como científicos, Marilyn se convirtió en escritora y columnista. Desde 1986, publicó la famosa columna Ask Marilyn en la revista Parade, donde respondía preguntas complejas de lógica, filosofía y matemáticas.
En 1990 su fama se extendería por todo el mundo, resolvió públicamente la famosa paradoja de Monty Hall, generando una intensa polémica entre matemáticos y estadísticos que inicialmente la desacreditaron y la rechazaron, hasta que se demostró que tenía razón.
Su vida no fue la de una genio encerrada en laboratorios, o resolviendo cálculos y formulas matemáticas, sino la de una mujer que usó su inteligencia para comunicarse con el público, escribir sátira política, y promover el pensamiento crítico. Se casó con el inventor del corazón artificial, Robert Jarvik, y fundó la Mega Society, un grupo para personas con IQ excepcionalmente alto.
Marilyn vos Savant no vivió para impresionar con cifras, sino vivió para pensar, escribir y desafiar ideas, y eso, quizás, es lo más brillante que hizo.
