* La forma de atender e investigar en esta área cambiarán cuando se consideren las experiencias, vivencias y sentires femeninos: Norma Blazquez.
17.06.2024 México.- Es importante generar políticas, no sólo de participación, sino de reconocimiento de las mujeres en el campo de la salud. La forma de atender e investigar en esta área cambiarán cuando se consideren las experiencias, vivencias y sentires femeninos, porque eso permitirá complementar muchas áreas del conocimiento y abordar otras que no habían sido tratadas, afirmó Norma Blazquez Graf, titular de la Coordinación para la Igualdad de Género de la UNAM.
Al poner en marcha el Foro por el Día Internacional de Acción por la Salud de las Mujeres, la funcionaria destacó que en toda la Universidad hay una propuesta de igualdad de género, y la Facultad de Medicina (FM) se ha caracterizado, y más ahora, en la consolidación y el impulso de esa política en la salud.
No podemos olvidar lo que acaba de pasar con la pandemia: cómo el conocimiento biomédico fue fundamental para resolver tantas incertidumbres, y a quienes estuvieron al frente del cuidado de la salud de las personas, resaltó.
La inclusión de la perspectiva de género en la salud es muy importante, desde la prevención, la atención, el conocimiento y la formación para la práctica médica, recalcó Blazquez. “Es un gran cambio que las mujeres sean el 60 % de la matrícula de licenciatura, y ojalá sea así en el posgrado muy pronto”. Con ese personal, la calidad de la investigación y la docencia en este campo irán cambiando, consideró.
En la inauguración, María del Carmen Jiménez Martínez, representante de la Comisión Interna para la Igualdad de Género de la FM, recordó que la salud es bienestar físico, mental y social, y no sólo la ausencia de enfermedad; lograr esto en la comunidad es un reto que asume la Facultad, donde se forman profesionales de la salud.
El Foro, expuso en el Auditorio Fernando Ocaranza, es un recordatorio, una experiencia y una oportunidad para que todos sumemos en pro de la salud de la mujer.
Durante la ponencia Enfermedad cardiovascular en las mujeres, Gabriela Borrayo Sánchez, secretaria general de la FM, señaló que la primera causa de muerte femenina son las enfermedades del corazón. Por cada mujer que fallece de cáncer de mama, 13 lo hacen por esta razón; y entre los padecimientos cardiovasculares, el más frecuente es la cardiopatía isquémica.
En ese sector de la población, detalló la experta, son más habituales los factores de riesgo, como el estrés y la ansiedad, dislipidemia, diabetes, hipertensión arterial, el alto consumo de sal, obesidad, sedentarismo, y, por supuesto, el climaterio y la menopausia. El único menos frecuente es el tabaquismo.
El promedio de aparición de un infarto es de 62 años en los varones y de 66 en las mujeres; esa brecha entre unos y otras es más corta que en otros países, alertó.
Alicia Piñeirua Menéndez, infectóloga e investigadora del Consorcio de Investigación en Salud, CISIDAT, en tanto, habló de la Importancia y retos en VIH-Sida y mujeres. Expuso que en México se estima que hay 240,000 personas infectadas; sólo 67 % sabe que tienen el virus, 61 % está en tratamiento antirretroviral y 54 % ha alcanzado la supresión virológica. “Nuestro principal problema es el diagnóstico de la infección”.
Aunque, en general, hay cuatro hombres infectados por una mujer, agregó, es diferente “dependiendo de qué México estemos hablando”. También en nuestro territorio hay 74,000 mujeres cisgénero con la infección.
Finalmente, alertó que no hay programas de difusión que hagan sentir que ellas deben tomar acción en términos de prevención, diagnóstico y atención para el VIH.
En tanto, Claudia Haydeé Arce Salinas, coordinadora de Equidad y Género de la Sociedad Mexicana de Estudios Oncológicos, al hablar de los Retos actuales en cáncer en las mujeres, dijo que esa es la tercera causa de muerte en la población, y se espera que haya un incremento en la incidencia mayor al 30 % en los siguientes 10 años. Además, en los últimos años no se ha modificado la tasa de mortalidad por cáncer; “no hemos tenido el impacto que buscamos”.
En las dos neoplasias que ocurren con más frecuencia en mujeres, la perspectiva de género cobra un factor relevante: cáncer cervicouterino y de mama.
Ninguna mujer debería tener el primero, porque es prevenible con vacunación; sin embargo, casi 12 fallecen al día por esta causa. Sus principales factores de riesgo son el inicio temprano de la vida sexual, el número de compañeros sexuales y el contacto sexual con individuos de riesgo.
El intervalo entre la adquisición de la infección y el desarrollo de la enfermedad es de 10 años, sin embargo, sólo cuatro de cada 10 se realiza estudios de prevención; la mayoría no acude al médico porque se les etiqueta y estigmatiza, y por ello el mal se detecta en etapas avanzadas.
En el caso de cáncer de mama, se detectan 30,000 nuevos casos cada año; se diagnostica cuando las lesiones son palpables. “La mortalidad disminuye gracias a la detección oportuna y los medicamentos. Por ello se requiere promover la educación para la salud, los estudios de tamizaje y el diagnóstico temprano”, concluyó.
Gaceta UNAM