La vida de las mujeres importa .

* Escrito por Cirenia Celestino Ortega.

La vida de las mujeres importa, aunque es una afirmación vacía para algunos. En los últimos días sucedieron al menos tres hechos que nos hacen dudar que las instituciones se tomen en serio la vida de las mujeres:

Rodrigo, el adolescente de 13 años que salió libre tras apuñalar 15 veces a su novia afuera de su escuela, sobreviviente de feminicidio; Rodolfo, el influencer que golpeó a una mujer en el estacionamiento de una plaza comercial el 22 de febrero, detenido el 4 de abril, otra sobreviviente de feminicidio y; Miguel, el feminicida en serie que ha asesinado mujeres desde 2012.

Las mujeres no estamos seguras en casa, en escuelas, en el trabajo, en el espacio público y privado. Son hombres “sanos”, como cualquiera, son estudiantes, compañeros de trabajo, amigos, hijos, padres, influencers, pero, también, son asesinos.

¿Cuántas violencias viven las mujeres?

Violencia mediática, cometida a través de cualquier medio de comunicación, que haga apología de la violencia contra las mujeres y las niñas, que cause daño a las mujeres y niñas de tipo psicológico, sexual, físico, económico, patrimonial o feminicida.

De manera permanente se divulgaron videos de las agresiones, aparecen las mujeres golpeadas, sangrando, siendo violentadas, mientras se muestran fotografías de los agresores sonrientes, tranquilos, sin rastros de arrepentimiento.

Violencia en el noviazgo, tipificada en la Ciudad de México. Es el acto abusivo de poder u omisión intencional, dirigido a dominar, someter, controlar o agredir a las mujeres mediante la relación de uno o varios tipos de violencia, durante o después de una relación de noviazgo, una relación afectiva o de hecho o una relación sexual.

Algunas logran ser sobrevivientes de violencia feminicida. La forma extrema de violencia de género contra las mujeres, son muertes evitables, conductas que afectan gravemente la integridad, la seguridad, la libertad personal y el libre desarrollo de las mujeres.

Todas muestran expresiones de la indolencia de las autoridades, de su tardanza en investigar las desapariciones de mujeres y para llevar procesos de acceso a la justicia, es decir, la violencia Institucional.

Actos u omisiones de los servidores públicos a través de los cuales obstaculizan o impiden el goce y ejercicio de los derechos humanos de las mujeres así como su acceso al disfrute de políticas públicas destinadas a prevenir, atender, investigar, sancionar y erradicar los diferentes tipos de violencia.

Los casos mencionados suceden en un contexto de violencia estructural y naturalizada. Datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad refiere que en 2023 se registraron 827 casos de feminicidio, 2 mil 581 registrados como “presuntas víctimas mujeres de homicidio doloso” y las 3 mil 740 registradas como “presuntas víctimas mujeres de homicidio culposo”. Son entonces, 7 mil 148 mujeres asesinadas en 2023, no son 11 sino 19 diarias.

En el primer debate presidencial, las propuestas se redujeron a fortalecer fiscalías, sin decir cómo; atender llamadas, trabajar en el sistema nacional de cuidados sin entender de qué se trata o atender las causas de la impunidad, nuevamente sin decir cómo se logrará.

No fue un tema del segundo debate

Lo cierto es que requerimos con urgencia un cambio de política. Necesitamos una estrategia integral para erradicar la violencia contra las mujeres que atienda todos los ámbitos.

Acciones de prevención en las escuelas y en los hogares, en las empresas y en las instituciones.

La transformación del sistema de justicia para que ésta, la justicia actúe con prontitud, con investigaciones que lleven a la verdad de los hechos, y la sanción de los agresores para garantizar la no repetición.

Acciones que no se reduzcan a la Alerta de Violencia de Género que no ha logrado la coordinación interinstitucional para que las autoridades actúen a tiempo frente a los casos de desaparición de mujeres y los casos de feminicidio.

Pero, sobre todo, el compromiso real, el convencimiento de las autoridades de que la vida de las mujeres importa y se requieren acciones contundentes.

CARRUSELPARTICIPACIÓN POLÍTICA DE MUJERES